España ha vivido un verano de 2024 para el recuerdo en el sector turístico. Con cifras récord en llegadas de turistas internacionales y gasto turístico, el país ha consolidado su posición como un destino de primer nivel a nivel mundial. Entre junio y septiembre, 40,6 millones de viajeros visitaron España, generando un impacto económico de 55.885 millones de euros.
Estos datos, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), superan las cifras de 2018, el anterior verano récord, con un crecimiento del 8% en llegadas. Este éxito se debe a una combinación de factores, entre los que destacan la diversificación de mercados emisores, la inversión en infraestructuras y la apuesta por un turismo de calidad.
El auge del turismo en España no es fruto de la casualidad, sino de una estrategia a largo plazo que combina diferentes elementos:
- Diversificación de mercados: El crecimiento del turismo procedente de mercados lejanos como América del Norte y América Latina demuestra el éxito de la estrategia de diversificación. Este interés creciente por España como destino turístico de largo radio compensa la leve disminución de visitantes del Reino Unido, tradicionalmente el principal mercado emisor. Factores como la incertidumbre económica post-Brexit y las fluctuaciones de la libra esterlina podrían explicar esta ligera bajada de turistas británicos (8,7 millones frente a los 8,9 millones de 2018).
- Inversión en calidad: Más allá de las cifras récord, el Gobierno, a través del ministro de Turismo, Jordi Hereu, pone el foco en la calidad y la diversidad del turismo. Se busca un turismo sostenible, tanto social como ambiental y económicamente, que beneficie a todos los actores implicados. La desestacionalización y la desconcentración son dos objetivos clave para evitar la saturación en destinos concretos durante los meses de julio y agosto, distribuyendo el flujo turístico a lo largo del año y del territorio. Esta apuesta por la calidad se traduce en una mayor inversión en infraestructuras, servicios y promoción de destinos menos conocidos.
- Aumento del gasto por turista: El gasto medio por turista se situó en 1.370,25 euros, un 4,2% más que el año anterior. Este incremento, unido al aumento en el número de visitantes, explica el récord de ingresos. La duración media de los viajes se mantuvo en siete días. Este dato revela que los turistas valoran la experiencia y están dispuestos a invertir en disfrutar de unas vacaciones de calidad.
El impacto económico del turismo en España
El sector turístico se ha consolidado como un motor fundamental de la economía española. El verano de 2024, con sus cifras récord, confirma esta tendencia. El impacto económico se refleja no solo en los ingresos directos, sino también en la creación de empleo y el desarrollo de infraestructuras.
- Resultados positivos en los destinos turísticos: El Barómetro de Rentabilidad y Empleo de los 100 principales destinos turísticos, elaborado por Exceltur, refleja un balance positivo para la mayoría de los destinos españoles. Con un incremento del 9,8% en los ingresos, la mayoría de los destinos analizados superaron los resultados del verano de 2023. Este crecimiento se debe, en parte, a la inversión realizada por las cadenas hoteleras en la renovación de sus establecimientos, lo que ha permitido un aumento de precios y una mejora en la calidad del empleo.
- Récord de pernoctaciones hoteleras: Las pernoctaciones en hoteles alcanzaron los 169,2 millones, superando el anterior récord de 2019. Este dato demuestra la fortaleza del sector hotelero y su capacidad para atraer a un gran número de turistas. El aumento del Ingreso Medio por Habitación Disponible (RevPAR) en un 9,8% confirma la rentabilidad del sector.
- Crecimiento del tráfico aéreo: El número de pasajeros internacionales que llegaron a España por vía aérea también batió récords, alcanzando los 43 millones, un 7,3% más que en 2019. Este dato refleja la importancia del transporte aéreo para el turismo en España y la capacidad del país para gestionar un volumen creciente de pasajeros.
En resumen, el verano de 2024 ha sido histórico para el turismo en España. Las cifras récord en llegadas, gasto y pernoctaciones confirman la fortaleza del sector y su capacidad para generar riqueza y empleo. La apuesta por la calidad, la diversificación de mercados y la inversión en infraestructuras son las claves del éxito de un modelo turístico que mira al futuro con optimismo. El reto ahora es consolidar este crecimiento y seguir trabajando para que el turismo sea una fuente de prosperidad sostenible para España.