CaixaBank ha desvelado su ambicioso plan estratégico para el periodo 2025-2027, centrado en un crecimiento exponencial, una rentabilidad sin precedentes y una decidida apuesta por la transformación digital. Este plan promete duplicar el ritmo de crecimiento en créditos y alcanzar un ROTE (Retorno sobre Capital Tangible) superior al 15%.
CaixaBank proyecta un crecimiento anual compuesto del 4% en volumen de negocio durante los próximos tres años, duplicando la cifra del trienio anterior. Esta expansión se sustentará en el aprovechamiento de las oportunidades en todos los segmentos de clientes, tanto en España como en Portugal. La entidad financiera confía en un crecimiento anualizado superior al 2% en hipotecas, superando el 6% en crédito al consumo y más del 5% en crédito a empresas. Este impulso se verá reflejado en un crecimiento anualizado medio del 4% en recursos de clientes, con un aumento superior al 3% en depósitos y más del 6% en gestión patrimonial.
El margen de intereses se prevé estable, superando los 11.000 millones de euros, a pesar de la previsión de tipos de interés ligeramente a la baja. La entidad ha reducido su sensibilidad a las fluctuaciones de los tipos, compensando los menores ingresos con una gestión activa de la cartera. Se espera una reducción de 3.000 millones en el margen de interés de los créditos para 2027 en comparación con 2024, que se compensará con un aumento de 1.900 millones por la cartera Alco, 500 millones por el mayor volumen de crédito y 600 millones por el incremento en el volumen de depósitos. Los ingresos por servicios experimentarán un crecimiento moderado, con especial énfasis en la gestión patrimonial y los seguros de protección. La ratio de eficiencia se situará ligeramente por encima del 40%, con un crecimiento anual de costes del 4%. Se estima una morosidad en torno al 2%.
La rentabilidad es un pilar fundamental del plan. Se prevé un ROTE superior al 16% para el cierre de 2027, con un promedio del 15% para el trienio. La entidad continuará generando capital de forma orgánica y recurrente, manteniendo una elevada liquidez que supera ampliamente los requisitos regulatorios. La política de distribución de beneficios se mantendrá entre el 50% y el 60% de los beneficios netos, además de la distribución del exceso de capital CET1 por encima del 12,5%. El objetivo de gestión de capital se sitúa entre el 11,5% y el 12,25% para 2025, y entre el 11,5% y el 12,5% para 2026, considerando el nuevo colchón de capital anticíclico. Se busca alcanzar los 12.000 millones de euros en remuneración al accionista en el marco del trienio 2022-2024, habiendo distribuido ya 9.500 millones.
Transformación digital e innovación
CaixaBank invertirá más de 5.000 millones de euros en tecnología en los próximos tres años, modernizando y rediseñando sus canales digitales con el apoyo de la inteligencia artificial generativa. Esta inversión se traducirá en la contratación de 3.000 jóvenes profesionales, principalmente con perfiles técnicos, impulsando el talento y la innovación dentro de la organización.
La entidad apuesta por la combinación de lo digital con la atención personalizada. A pesar de la digitalización, CaixaBank mantendrá su red de oficinas físicas y reforzará su equipo de gestores especializados.