Buscar trabajo puede ser un proceso agotador, cargado de incertidumbre y ansiedad. Las solicitudes enviadas que no reciben respuesta, las entrevistas que parecen no avanzar, y la sensación de competir contra un sinfín de candidatos pueden volverse abrumadoras. La espera se hace interminable y, con cada rechazo, la autoconfianza se desgasta un poco más. Los días se llenan de intentos por destacarse, de adaptar currículums y redactar cartas que esperan causar una buena impresión. Todo esto se mezcla con la presión económica y el deseo urgente de estabilidad, creando un ciclo donde la desesperación asoma, poniendo a prueba la resiliencia. Pero ojo, ten mucho cuidado porque una estafa juega con las ilusiones de personas como tú.
2Ello se debe al aumento de las tecnologías
El aumento de las tecnologías ha facilitado el surgimiento de nuevas formas de estafas. La digitalización permite a los estafadores operar de manera más sigilosa y rápida, alcanzando a un mayor número de personas. Plataformas como redes sociales, correos electrónicos y sitios web son ahora medios comunes para perpetrar engaños. Además, la tecnología ha dado lugar a herramientas más sofisticadas, como el phishing, que imitan a empresas legítimas, lo que dificulta la detección de fraude y aumenta el riesgo para usuarios poco cautelosos. La vulnerabilidad digital crece conforme avanza la tecnología.