Belén Esteban ha comenzado una nueva aventura como copresentadora en el canal TEN. Este nuevo programa, llamado «Ni que fuéramos Shhh», ha llevado a Belén a realizar una serie de apariciones públicas en los medios. Desde el inicio de la gira promocional, la llamada «Princesa del Pueblo» ha visitado varios programas, incluyendo ‘La Revuelta’ y ‘El Hormiguero’, donde ha compartido detalles de su vida personal y profesional.
En su última aparición en el programa ‘Col·lapse’ de 3cat, dirigido por Ricard Ustrell, Belén reveló detalles de su nueva etapa en televisión y explicó su situación actual tras el cierre de su empresa de alimentación. En una conversación cercana y sin tapujos, la presentadora habló sobre sus nuevas experiencias laborales, su situación económica, y aclaró cualquier duda sobre su estabilidad financiera.
“Tengo el mismo contrato que en Telecinco”
Durante su charla con Ricard Ustrell, Belén respondió a varias preguntas sobre su carrera en televisión y sus proyectos actuales. Con nostalgia y orgullo, recordó su tiempo en Telecinco, donde se mantuvo en lo más alto de la audiencia con programas como ‘Sálvame’. A pesar de que «Ni que fuéramos Shhh» es un proyecto más modesto, asegura estar afrontando esta etapa con gran ilusión. “Es un programa pequeño, pero poco a poco estamos subiendo”, explicó, resaltando que se siente contenta con la respuesta del público.
Ustrell, interesado en su situación económica, le preguntó si su contrato con TEN se equipara al que tenía en Telecinco. La presentadora, sin entrar en detalles numéricos, afirmó que su sueldo se ha mantenido estable. “Gracias a Dios, tengo el mismo contrato”, afirmó, señalando que cuenta con un contrato de exclusividad con Fabricantes Studio, la productora encargada de su nuevo programa. Esta seguridad económica le permite explorar su faceta como presentadora sin la presión de una inestabilidad financiera.
Durante la entrevista, la sorpresa llegó cuando Ustrell le preguntó por su empresa de alimentación, ‘Los Sabores de la Esteban’, conocida por sus productos de gazpacho y salmorejo. Fue entonces cuando Belén anunció que, después de varios años en el mercado, ha vendido su empresa de gazpachos. Esta decisión tomó a muchos por sorpresa, ya que la empresa había sido un proyecto que ella defendió con gran pasión desde su lanzamiento.
Según Belén, su deseo de mantener un precio accesible para sus productos fue uno de los motivos principales detrás de esta venta. Explicó que, aunque establecía un precio fijo para sus gazpachos, cada supermercado fijaba su propio precio final, algo que iba en contra de su objetivo de hacer que “todo el mundo pudiera comprar” su producto. Este desajuste en los precios terminó siendo un problema difícil de resolver.
Además de los problemas de precio, Belén también mencionó la falta de tiempo como un factor importante en su decisión de cerrar la empresa. Con su apretada agenda de televisión y otros compromisos, le resultaba cada vez más complicado supervisar personalmente los detalles de la gestión. Como empresaria, Esteban valoraba la posibilidad de controlar de cerca su proyecto, algo que ya no podía hacer debido a sus múltiples responsabilidades.
La venta de su empresa no solo le permitió cerrar esa etapa con ganancias, sino que le dio la tranquilidad de tomar un descanso de sus responsabilidades empresariales. Belén aclaró que esta no es una retirada definitiva del mundo de los negocios, sino un «hasta luego», ya que tiene planes de volver en el futuro a explorar oportunidades en el sector alimentario.
1Aclaración sobre su situación económica: “No estoy en la ruina”
A raíz de la noticia sobre el cierre de su empresa, surgieron rumores sobre la posibilidad de que Belén estuviera atravesando problemas financieros. Sin embargo, Esteban desmintió estas especulaciones durante la entrevista, afirmando que, lejos de estar en dificultades, esta venta le ha proporcionado una base financiera sólida. “Con este movimiento económico, he cerrado esta etapa con ganancias”, aseguró, tranquilizando a sus seguidores y dejando claro que su situación económica es estable.
Belén reconoció que, aunque ha dado un paso atrás en el mundo empresarial, se encuentra satisfecha con los resultados obtenidos y con la oportunidad de dedicarse de lleno a su carrera en televisión. La venta de la empresa no es una señal de problemas económicos, sino un cambio estratégico que le permite concentrarse en otras facetas de su vida.
Para Belén Esteban, este cambio en su vida marca el inicio de una nueva etapa profesional que afronta con optimismo. En su nuevo rol en TEN, tiene la oportunidad de conectar con el público en una faceta distinta a la de colaboradora, explorando nuevas áreas en el ámbito de la presentación. A pesar de los desafíos, se muestra decidida a seguir adelante con este proyecto.
Con su particular estilo y autenticidad, Belén ha logrado mantener el apoyo de su público. Aunque sus días como empresaria están en pausa, su presencia en televisión sigue siendo fuerte, y sus fans continúan siguiéndola con interés. Belén Esteban parece haber encontrado un equilibrio entre su vida personal y profesional, y está preparada para continuar sorprendiendo al público en sus próximas aventuras.
En conclusión, la “Princesa del Pueblo” se enfrenta a un nuevo capítulo en su vida, con la mirada puesta en la televisión y el deseo de retomar el mundo empresarial cuando el momento sea adecuado. La venta de su empresa de gazpachos no ha significado el fin de su carrera como empresaria, sino una pausa estratégica para poder explorar otras oportunidades y desafíos en su trayectoria profesional.