Las recientes declaraciones de Lydia Lozano han desvelado detalles sorprendentes de la boda entre Ana Guerra y Víctor Elías, que tuvo lugar el pasado 31 de octubre. Aunque gran parte de lo sucedido en el enlace sigue siendo un misterio para los seguidores de la pareja, Lozano, una de las invitadas más esperadas, decidió compartir algunos momentos y anécdotas durante su intervención en el programa Canal Quickie. Lo más impactante que reveló fue que, a pesar de las expectativas, no hubo alcohol en la boda. Este detalle provocó reacciones de incredulidad entre sus compañeros, ya que la propia Ana había mencionado previamente esta peculiaridad en su visita a El Hormiguero.
2Ana Guerra y Víctor Elías están en su mejor momento
A través de sus redes, Ana y Víctor manifestaron su deseo de ir a Valencia para ayudar a los damnificados, pero, lamentablemente, no pudieron hacerlo debido a restricciones impuestas por las autoridades. En sus historias, Ana expresó: “Lo que necesiten, pueden contar con nosotros. Hemos intentado ir allí, pero nos han dicho que no, que ayudemos desde aquí”. Este compromiso altruista refleja la empatía de la pareja y su deseo de contribuir de cualquier manera posible en un momento tan crítico.
Ana también instó a los voluntarios que se dirijan a las zonas afectadas a que tomen las precauciones necesarias, recordándoles que es vital cuidar su salud para poder ayudar a otros. “Si van a ayudar allí, que lo hagan con mascarilla y guantes”, enfatizó, subrayando la importancia de protegerse de posibles infecciones en un entorno donde la crisis humanitaria está en aumento. “Tenemos que cuidarnos nosotros para poder cuidar a los demás”, concluyó la cantante, cerrando su mensaje con un tono solidario y responsable.
Así, la boda de Ana Guerra y Víctor Elías no solo se recordará como un evento lleno de amor y alegría, sino también como un momento en el que la pareja demostró su compromiso social en un contexto de crisis. A pesar de las dificultades que enfrentaron tras su unión, ambos han elegido ser una voz activa en la comunidad, trabajando para ayudar a quienes lo necesitan en un momento de desolación y sufrimiento. La historia de su boda, por lo tanto, va más allá de la celebración, reflejando la importancia de la solidaridad y la empatía en tiempos difíciles.