Los consejos de la Dirección General de Tráfico (DGT) son altamente válidos para promover la seguridad vial y salvar vidas. Siguiendo sus recomendaciones, como el uso obligatorio del cinturón de seguridad, la importancia de mantener la distancia de seguridad y el respeto a los límites de velocidad, se pueden reducir significativamente los accidentes de tráfico. La DGT también insiste en evitar el uso del móvil mientras se conduce, una causa frecuente de distracciones. Además, promueve campañas de concienciación sobre los efectos del alcohol y las drogas al volante. Estas medidas son esenciales para crear entornos más seguros para todos los usuarios de las vías. Y ahora, desde la Dirección, alertan sobre cómo el estrés afecta a tu conducción.
7Esta es la primera de las fases de las que la DGT alerta
Esta es la primera de las fases de las que la DGT alerta: reacción de alarma. En esta etapa, el cuerpo reacciona al estrés activando mecanismos de defensa, lo que genera una respuesta fisiológica inmediata. Esta reacción puede provocar que el conductor se sienta más tenso y nervioso, lo que impacta en la concentración y en la capacidad para evaluar situaciones. La DGT advierte que, durante esta fase, el aumento de la irritabilidad y la dificultad para mantener la calma pueden derivar en decisiones precipitadas, afectando la seguridad de quienes circulan por la carretera.