Iñaki Urdangarin se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para la monarquía española y también para Juan Carlos I, cuya reciente vida en Abu Dabi, lejos de las miradas críticas de la prensa española, parece ser un alivio tanto para Felipe VI como para la reina Letizia. Sin embargo, su presencia en el extranjero no ha disminuido la atención sobre sus actividades y el impacto que pueden tener en la reputación de la corona.
7Iñaki Urdangarin: nuevas exigencias económicas a la Infanta Cristina, en un divorcio que no termina
La separación entre Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina, que se formalizó en enero de este año, parecía haber cerrado un capítulo complicado en la vida de ambos. Este proceso se extendió durante meses, justo después de que su hija Irene alcanzara la mayoría de edad. Sin embargo, lo que debería haber sido un final pacífico ha derivado en una nueva serie de escándalos que involucran exigencias monetarias y secretos familiares.
Cristina tomó la difícil decisión de firmar un acuerdo que, aunque implicó un desembolso considerable, le permitió regresar a la vida pública y mejorar su relación con su hermano, el rey Felipe VI. Este pacto no fue sencillo de alcanzar; desde el inicio del proceso, Urdangarin se sintió traicionado y expresó su descontento por las repercusiones del Caso Nóos, que había expuesto a la familia real a un escrutinio indeseado. En este ambiente de tensión, Iñaki reclamaba compensaciones por el dolor emocional que había sufrido, argumentando que él había cargado con las consecuencias de un escándalo que afectó a todos.