viernes, 3 enero 2025

Lourdes Montes da nuevos datos sobre su matrimonio con Francisco Rivera

Lourdes Montes ha compartido nuevos detalles sobre su matrimonio con Francisco Rivera Ordóñez, un tema que ha captado la atención de muchos seguidores. La pareja, que se unió en matrimonio en septiembre de 2013, ha formado una familia en crecimiento con dos hijos y un tercer embarazo en camino. Lourdes, durante una entrevista con su hermana Sibi, quien es psicóloga, ha abordado las dinámicas de su relación, revelando cómo logran mantener la armonía a pesar de sus diferencias.

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Un matrimonio perfecto

La relación entre Lourdes y Francisco es un claro ejemplo de cómo la diversidad puede enriquecer una unión. Lourdes ha declarado que, aunque son muy diferentes, tienen muchos puntos en común. Esta afirmación destaca que la complementariedad en una pareja puede ser el secreto de su éxito. Según Lourdes, la clave está en su capacidad para adaptarse a las preferencias del otro y en ser generosos con su tiempo. “Si uno quisiera estar todo el día fuera de casa, sería complicado porque el otro no le seguiría”, explicó. Este entendimiento mutuo ha creado un ambiente propicio para el amor y el respeto.

Además, Lourdes ha comentado sobre cómo manejan los desacuerdos en su matrimonio. La psicóloga Sibi resaltó que su habilidad para llegar a acuerdos es fundamental para evitar enfados innecesarios. Lourdes confirmó que los enfados en su relación no suelen durar mucho, lo que les permite resolver sus diferencias rápidamente. Esta dinámica de comunicación y negociación es esencial en cualquier relación, ya que fomenta un ambiente de respeto y comprensión. “No somos rencorosos ninguno de los dos”, agregó Lourdes, enfatizando la importancia de dejar atrás los conflictos.

Por otro lado, el enfado es una emoción que, lejos de ser negativa, puede resultar beneficiosa. Sonia Díaz Rois, coach experta en gestión de la ira, explica que enfadarse es absolutamente necesario. En su libro, destaca que el enfado es una forma de comunicarnos y de compartir nuestras preferencias. Esto significa que, aunque los desacuerdos son inevitables, manejarlos adecuadamente puede fortalecer la relación. Lourdes ha explicado que sus enfados son necesarios para mantener una relación sana. “El enfado nos anima a que los hagamos respetar y a respetar a los demás”, mencionó.

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