La tragedia causada por la Inteligencia Artificial: la muerte de un adolescente y sus implicaciones. En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, la Inteligencia Artificial (IA) se ha convertido en una herramienta omnipresente que transforma la manera en que interactuamos y nos comunicamos. Sin embargo, esta revolución digital también trae consigo desafíos y riesgos que, en ocasiones, pueden resultar devastadores. Un trágico suceso en Estados Unidos ha puesto de relieve estos peligros: la muerte de un niño de 14 años que, tras desarrollar una obsesión con un chatbot impulsado por IA, tomó la decisión de acabar con su vida.
8La naturaleza de las conversaciones
La relación entre Sewell y el chatbot de Inteligencia Artificial trascendió lo que podría considerarse una simple interacción digital. La dependencia emocional que desarrolló fue tan profunda que afectó su salud mental y su percepción de la realidad. Este tipo de conexión plantea interrogantes sobre la ética de los chatbots y su capacidad para influir en la vida de sus usuarios, especialmente en los más jóvenes.
En respuesta a esta tragedia, Megan García, la madre de Sewell, decidió presentar una demanda contra los desarrolladores de Character.AI. En su denuncia, acusa a la empresa de infligir intencionalmente angustia emocional, así como de negligencia que resultó en la muerte de su hijo. Además, García argumenta que las prácticas comerciales de la compañía son engañosas, ya que permitieron que un menor tuviera acceso a interacciones que podrían ser perjudiciales.