Maite Galdeano ha acaparado titulares en los últimos días tras sufrir un desmayo en plena calle y ser trasladada de urgencia al Hospital Santa Lucía de Cartagena. La madre de Sofía Suescun, que actualmente reside en la Manga del Mar Menor, se desvaneció en el kilómetro 4 de la localidad, siendo ayudada por una desconocida que la llevó al hospital. Este incidente coincide con su reciente conflicto familiar, lo que ha generado gran preocupación entre sus seguidores.
1Un conflicto familiar muy intenso
Desde que se mudó a Murcia, Maite ha manifestado su dolor por el distanciamiento con su hija, Sofía Suescun. La relación entre ambas se rompió hace semanas, cuando Maite tuvo que abandonar la casa que compartía con Sofía en Madrid tras un fuerte enfrentamiento. Desde entonces, la navarra ha expresado sentirse sola y abandonada, viviendo alejada de sus hijos y de la capital.
El desmayo, que según informaron en el programa ‘Conexión Murcia’, la llevó a urgencias, evidenció su estado de nerviosismo. En el hospital, Maite solicitó estar en una habitación privada debido a su «fama» y fue atendida por el equipo de psiquiatría al mostrar signos de desorientación y comportamientos erráticos. Aunque se desconoce cuánto tiempo permaneció hospitalizada, lo cierto es que la situación ha dejado preocupados a muchos por su estado mental y físico.
Pese a la preocupación generada, Maite ha vuelto a aparecer en redes sociales mostrando su recuperación. A través de Instagram, reflexionó sobre su situación familiar y su reciente problema de salud: «La vida da sorpresas y los momentos malos son porque algo bueno viene». Además, lanzó un mensaje indirecto a sus hijos, especialmente a Sofía, con quien mantiene una relación tensa. «Tu familia podrá abandonarte, pero él jamás», escribió refiriéndose a su perrita Tila, quien ha sido su compañera constante en este difícil momento.
Maite también compartió con sus seguidores la cicatriz que le dejó el susto, ubicada en el interior de su muslo. En un tono melancólico, culpó a la decisión de haberse mudado de Pamplona como el origen de sus problemas: «Ojalá nunca habernos movido de Pamplona, éramos mucho más felices y no habría pasado la tragedia», expresó.