Los cubiertos oxidados pierden su utilidad debido a la corrosión, que no solo afecta su apariencia, sino también su funcionalidad. El óxido debilita el metal, haciéndolo más propenso a romperse o doblarse bajo presión. Además, el óxido puede transferirse a los alimentos, lo que representa un riesgo para la salud, ya que puede causar intoxicación o mal sabor. Aunque algunas personas intentan limpiar los cubiertos oxidados, es difícil restaurarlos a su estado original. Así, los cubiertos oxidados sirven de poco, ya que no son seguros ni efectivos para su propósito principal: el consumo de alimentos. Por eso, en este artículo te explicamos cómo hacer para dejarlos como nuevos.
7Esto es lo primero que has de hacer para dejar los cubiertos oxidados como nuevos
Esto es lo primero que has de hacer para dejar los cubiertos oxidados como nuevos. Una vez finalizado el proceso de limpieza, es crucial enjuagar bien los cubiertos para eliminar cualquier residuo de óxido y productos utilizados. Asegúrate de que no queden restos que puedan causar una nueva oxidación. Sobre todo, secarlos completamente es fundamental, ya que la humedad puede favorecer la corrosión.