Tanto consumidores como empleados están enfrentados a Ikea, según ha comprobado MERCA2. Una situación que pone a Ikea en una posición peligrosa que afecta a la imagen de la marca y a su reputación. La mala gestión de la compañía de muebles y decoración del hogar puede traer graves consecuencias que sirvan en bandeja el negocio a sus dos grandes competidores, JYSK, y Kave Home.
Sin ir más lejos, Ikea siempre ha sido la compañía número 1 en muebles y decoración, ya no solo por su amplio portafolio de productos, sino también por los bajos precios de venta que captan la atención del cliente. No obstante, el cliente, con la aparición de JYSK, que también tiene precios muy bajos, se fija cada vez más en una buena atención y en que pueda realizar sus compras de manera rápida y eficiente, algo que con las cajas automáticas de Ikea no consiguen cumplir.
Ikea está en muchísimas casas. La marca destaca por ofrecer productos de diseño innovador, calidad y funcionalidad, a precios accesibles para todos los presupuestos. Sin embargo, muchos son los consumidores que están dejando de realizar sus compras en Ikea por culpa de varias acciones que han ido sucediendo como las empresas de envíos a domicilio, en concreto Ader, que está causando problemas y enfados a los cliente y una mala atención que conlleva los clientes a dejar por el establecimiento los productos que, en teoría, se iban a llevar.
LOS CLIENTES PONEN EN DUDA LA ‘BUENA’ ATENCIÓN AL CLIENTE DE IKEA
La compañía de muebles y decoración es una de las muchas marcas que en su día se sumó a las cajas de autopago para evitar colas y facilitar la compra a los consumidores. No obstante, el objetivo que perseguía Ikea ha provocado el conocido como efecto rebote. En este sentido, en uno de sus establecimientos, concretamente, en el de la Calle Goya (Madrid), cuenta con un total de 8 cajas de autopago, donde en tan solo dos aceptan el pago en efectivo.
Dichas cajas de autopago están provocando en los establecimientos de Ikea que se produzcan largas colas de espera, clientes que tienen que dejar la compra en medio de la cola, ya que no cuentan con mucho tiempo y esperar en la cola les supone llegar tarde a otro lugar, y el enfado de una parte de los clientes qué pagan en efectivo que no encuentran justo que solo haya dos cajas aptas para pagar en efectivo.
IKEA SE QUEDA SIN TRABAJADORES EN PLANTA PARA AYUDAR A LOS CLIENTES
«Ikea está realizando un pensamiento erróneo. No puede ser que cuenten con ocho cajas de autopago y haya un total de cuatro dependientas ayudando en dichas cajas, pero luego cuando queremos buscar algún producto o que nos asesoren en las plantas del establecimiento no encontramos a nadie que nos pueda ayudar», señala Carmen a MERCA2.
Carmen suele ser clienta residual de Ikea en Madrid, pero va cambiando de establecimiento por qué se está encontrando que no hay empleados en planta que puedan darle una buena atención al cliente y que le ayuden a encontrar aquello que busca. Esta clienta, que ha hablado con MERCA2, ha explicado que «lo más fuerte que me parece, aunque seamos humanos y tengamos errores, es que en Ikea cuentan con casi una empleada para controlar y pasar los artículos por las cajas de autopago y ya es la cuarta vez que me terminan cobrando de más».
No obstante, según explican fuentes cercanas a la compañía, al poco personal que sí está fuera de las cajas de autopago «no le dejan ayudar al cliente, sino que deben estar todo el tiempo reponiendo todos aquellos lineales y artículos que se hayan vendido para que vuelva a haber stock y se siga vendiendo». Este hecho sorprende y pone en duda que Ikea tenga que ser la compañía número 1 en muebles y decoración.
OLEADA DE DESPIDOS EN IKEA
Por si no fuera poco, a Ikea no paran de ‘salirle novias’. Desde junio de este 2024, es decir, desde hace menos de cinco meses, al menos 20 empleados del centro de Ikea en Alcorcón (Madrid), concretamente, en el polígono El Lucero, han sido despedidos bajo circunstancias que han generado una indignación conjunta no solo en todos los afectados, también en aquellos que siguen trabajando para Ikea.
La indignación viene dada por los motivos de despido que han comunicado desde la empresa a esos trabajadores. La compañía ha alegado que dichos empleados estaban teniendo bajo rendimiento y que ya contaban con más de 20 años de antigüedad en la empresa. Siendo estos motivos una tapadera para esconder el motivo principal: un problema de edad en empleado mayores de 40 años, según ha explicado una fuente a MERCA2, .
Desde Comisiones Obreras (CC. OO.) explican que la multinacional sueca ejecuta despidos disciplinarios e imposibilita la asistencia a los mismos a los delegados y delegadas de este sindicato. La central sindical se concentró el 7 de octubre ante la sede de Ikea en Alcorcón (Madrid) para exigir el cese de estas conductas que califican de antilaborales y antisindicales. «Una de las mejores empresas para trabajar, líder en el sector y con grandes beneficios, despide indiscriminadamente a un número importante de personas trabajadoras, que llevan más de 20 años en la empresa», apuntan.
La situación que puede ir a peor. Desde CCOO han exigido explicaciones y el cese de estas conductas, sin respuesta satisfactoria por parte de la dirección de la multinacional sueca, por lo que han iniciado movilizaciones para reiterar su postura. Además, desde el sindicato señalan que no cejarán su empeño hasta que Ikea respete como merecen a los trabajadores.