El sofrito perfecto es la clave para lentejas con calabaza irresistibles. Las lentejas son un plato tradicional que, a pesar de su simplicidad, puede convertirse en una experiencia culinaria memorable si se preparan adecuadamente. Pero, ¿qué es lo que realmente marca la diferencia entre unas lentejas sosas y unas que hacen que todos repitan? La respuesta está en el sofrito. Este proceso fundamental no solo añade sabor, sino que transforma los ingredientes en una sinfonía de aromas y texturas que despiertan el apetito.
7Utiliza verduras en trozos grandes

Una de las maneras más efectivas de enriquecer el sabor de tus lentejas es mediante la incorporación de verduras frescas. En lugar de picarlas finamente, corta hortalizas como zanahorias, puerros, tomates, ajos y cebollas en trozos grandes. Esta técnica no solo ahorra tiempo, sino que también permite que las verduras conserven su sabor y nutrientes durante la cocción.
- Cocción inicial: agrega las verduras a la olla junto con las lentejas y el agua. Cocina a fuego lento hasta que todo esté tierno.
- Extracción de verduras: una vez que el guiso esté cocido, retira las verduras enteras. Al no estar troceadas, son más fáciles de sacar y no se deshacen.