Las propuestas de políticas comerciales que van en el programa electoral de Donald Trump podrían elevar la inflación y reducir el crecimiento y los márgenes corporativos, según las previsiones que Ronald Temple, estratega jefe de mercados del Grupo Lazard, presentó recientemente en Madrid.
De hecho “los economistas han advertido que la propuesta de tarifa del 60% sobre las importaciones chinas y la tarifa del 10%-20% en otras importaciones extranjeras podrían costarle al hogar medio estadounidense entre 1.700 y 2.600 dólares al año”, recuerda Temple.
“Ambos partidos han indicado su intención de continuar con el escrutinio de las inversiones chinas en Estados Unidos, unido a un apetito en regular las exportaciones de tecnologías críticas (por ejemplo, semiconductores y biotech) y fortalecer cadenas de suministro de materiales asociados”, añade.
“Sin embargo, la agenda de Trump para China sería probablemente más ambiciosa y perturbadora, con menos tiempo para que el mercado se ajuste a ellas (por ejemplo, Trump ha propuesto un plan para eliminar gradualmente todas las importaciones chinas de bienes esenciales como el acero y los productos farmacéuticos en un plazo de cuatro años).
Temple desarrolla las tres grandes diferencias entre los dos programas electorales en liza con la lupa en las tres grandes diferencias para ellos mercados, como serían los impuestos, el comercio y la energía.
Trump vs. Harris: Impacto en los mercados
Kamala Harris propone en materia impositiva un aumento del 21% al 28% en los tributos corporativos, pero es improbable que se apruebe dado el probable control republicano del Senado. También propone ampliar de 2.000 a 3.600/6.000 dólares el crédito fiscal por hijo y las exenciones fiscales para pequeñas empresas y la extensión de recortes de impuestos de la era Trump para las personas que ganan menos de 400.000 dólares al año.
Donald Trump propone en los tipos empresariales una reducción del 21% a un mínimo del 15%, un crédito fiscal por hijos: no hay propuestas formales en los créditos fiscales por hijo, pero es probable que apoye el mantenimiento del actual crédito de 2.000 dólares por vástago, que las propinas estén exentas de impuestos y hacer permanentes los recortes fiscales que expiran en 2017.
En lo que respecta al comercio, para Harris la atención sigue centrada en la deslocalización de los materiales críticos y en vincular las disposiciones medioambientales con el comercio. Harris fue uno de los 10 senadores que votaron contra el USMCA, señalando que “al no abordar el cambio climático, el USMCA no responde a las crisis de este momento”.
China: tras las amplias medidas de relajación, se esperan medidas fiscales
Trump, por su parte, ha prometido ampliar significativamente los aranceles sobre aliados y adversarios por igual, incluyendo un arancel del 10-20% sobre todas las importaciones y un arancel del 60% sobre las importaciones chinas.
Esto podría aumentar la tasa arancelaria efectiva de EE.UU. a niveles no vistos desde la década de 1940, lo que podría elevar la inflación y afectar a los ingresos familiares.
En tercer y último lugar, Harris patrocinó como senador un amplio proyecto de ley sobre el clima (Green New Deal). Además, Walz firmó una ley que obliga a las empresas de servicios públicos a utilizar fuentes de generación 100% libres de carbono para 2040.
Trump, en cambio, apuesta por un recorte de la normativa medioambiental para fomentar la extracción nacional de petróleo y gas y por aumentar la presión sobre los créditos a las energías limpias / subvenciones a los vehículos eléctricos.
El informe sobre las elecciones estadounidenses termina con ciertos datos como que Harris tiene una estrecha ventaja sobre Trump a nivel nacional y en la mayoría de los estados disputados.
Y que es probable que la Cámara de Representantes siga el camino de la presidencia (demócrata o republicano), mientras que el Senado probablemente será republicano, independientemente de quién gane la presidencia. Esto podría crear un gobierno dividido para Harris, mientras que Trump tendría más probabilidades de tener un gobierno unificado.