Cocinar cualquier plato en casa puede convertirse en una experiencia enriquecedora y placentera. Más allá de los ingredientes, la cocina es un espacio donde se mezclan creatividad y amor por lo que se hace. Preparar tus propios alimentos te conecta con los sabores auténticos y te brinda la satisfacción de crear algo con tus manos. Además, puedes adaptar cada receta a tu gusto, experimentar con nuevas combinaciones y técnicas. No importa si es un plato sencillo o elaborado, el proceso es lo que lo hace especial, uniendo a las personas y ofreciendo un momento de disfrute personal y familiar. Por eso, en este artículo, para que lo que cocines te salga mejor, te contamos este truco: lo que prepares en casa te quedará de restaurante Michelin.
9Esta es la manera de hacer este caldo
Esta es la manera de hacer un delicioso caldo. Comienza poniendo unos huesos de pollo en una bandeja de horno. En vez de tirarlos, congélalos cada vez que cocinas. Una vez en la bandeja, hornéalos a máxima potencia hasta dorarlos. Luego, colócalos en una cacerola con agua y verduras al gusto. Después de cuatro horas, cuando el agua haya absorbido los jugos del pollo, destapa y sube el fuego para reducir. Una vez reducido, cuela el caldo y transfiérelo a otro recipiente para refrigerarlo toda la noche. ¡Listo para usar!