Si hay una organización que ha demostrado estar firme en su compromiso con la protección del usuario y su privacidad, así como con la libre competencia, esa es la Unión Europea (UE). En casos anteriores ya hemos visto cómo Apple, Google, Meta y demás compañías tecnológicas han tenido que rendirle cuentas al organismo europeo; ahora, es la firma de Cupertino la que vuelve a estar en el ojo del huracán, pero esta vez junto a iOS, su sistema operativo.
Desde su lanzamiento en el 2007, iOS nunca ha dejado de ser un sistema operativo exclusivo del iPhone de Apple, característica que le ha permitido a la compañía tener un punto extra de exclusividad en sus productos, teniendo en cuenta que a diferencia de Android, por ejemplo, iOS posibilita que solo los dispositivos complementarios de la empresa de la manzana mordida (como el Apple Watch) sean compatibles con sus teléfonos, cerrándole así las puertas de la compatibilidad a las demás compañías.
2Posible sanción en caso de incumplimiento
Claro está que este no sería el primer cambio revolucionario que Apple se vería obligada a cumplir gracias a la Unión Europea, pues hace poco esta compañía tuvo que empezar a permitir la instalación de tiendas de aplicaciones de terceros en sus dispositivos. Ahora bien, en caso de que la alternativa que propone la UE se materialice, esto no querrá decir que otros fabricantes puedan emplear iOS en sus propios teléfonos, sino que este sistema operativo pasaría a ser compatible con dispositivos de terceros y no solo de Apple, como sucede ahora.
Asimismo, si Apple no llegara a aceptar la hipotética normativa se vería obligada a pagar multas equivalentes hasta al 10 % de su facturación anual mundial; un «lujo» que probablemente no estaría dispuesta a darse.