jueves, 19 septiembre 2024

FIAB advierte que la industria alimentaria necesita más tiempo para cumplir con la normativa de sostenibilidad

La industria alimentaria española se encuentra en un momento crucial de transformación hacia prácticas más sostenibles. La Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) ha organizado una jornada para abordar las nuevas obligaciones del sector en materia de sostenibilidad, poniendo de manifiesto los desafíos y oportunidades que estas presentan para las empresas del ramo. El evento, respaldado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), ha servido como plataforma para discutir temas fundamentales como el desperdicio alimentario, la gestión de residuos, el uso de energía y el impacto del cambio climático en la industria.

En este contexto, el director general de FIAB, Mauricio García de Quevedo, ha expresado la preocupación del sector ante la creciente presión regulatoria en materia de sostenibilidad. Si bien reconoce los esfuerzos que la industria viene realizando desde hace tiempo en prácticas ambientalmente responsables, como la gestión eficiente de residuos y la adopción de energías renovables, García de Quevedo ha señalado que las nuevas normativas presentan desafíos significativos para las empresas, especialmente para las pequeñas y medianas que constituyen la columna vertebral del sector alimentario español.

El reto de la adaptación a las nuevas exigencias de sostenibilidad

La industria alimentaria española se enfrenta a un panorama regulatorio cada vez más exigente en materia de sostenibilidad. Las nuevas normativas, aunque bien intencionadas, están ejerciendo una presión considerable sobre las empresas del sector. Mauricio García de Quevedo ha expresado que la regulación en este ámbito es percibida como excesiva por muchos actores de la industria, lo que plantea desafíos significativos para su implementación efectiva.

El director general de FIAB ha hecho hincapié en la necesidad de contar con plazos más amplios para la adaptación a estas nuevas exigencias. La preocupación principal radica en que una implementación apresurada podría limitar la capacidad de las empresas para realizar inversiones y generar empleo. Este punto es particularmente crítico para las pequeñas y medianas empresas, que representan el 95% del sector y cuentan con recursos más limitados para hacer frente a cambios regulatorios de gran envergadura.

La adaptación a las nuevas medidas de sostenibilidad no solo implica cambios operativos, sino también inversiones significativas en tecnología y formación. Para muchas empresas, especialmente las más pequeñas, esto supone un reto financiero considerable. La industria argumenta que, sin el tiempo adecuado para planificar e implementar estos cambios de manera gradual, se corre el riesgo de afectar negativamente la competitividad del sector en su conjunto.

La búsqueda de un equilibrio entre sostenibilidad y competitividad

Un punto clave destacado durante la jornada es la necesidad de alinear la legislación española con la europea en materia de sostenibilidad. García de Quevedo ha enfatizado la importancia de este alineamiento para evitar que las empresas españolas pierdan competitividad en el mercado internacional. La preocupación radica en que, si las exigencias en España son más estrictas o se implementan más rápidamente que en el resto de Europa, las empresas nacionales podrían encontrarse en desventaja frente a sus competidores europeos.

La industria alimentaria española reconoce la importancia de avanzar hacia prácticas más sostenibles, pero aboga por un enfoque que tenga en cuenta las realidades económicas y operativas del sector. Se busca un equilibrio entre la ambición ambiental y la viabilidad económica, especialmente en un contexto post-pandémico donde muchas empresas aún están recuperándose de los impactos económicos.

La FIAB propone un diálogo más estrecho entre la industria y los reguladores para desarrollar un marco normativo que promueva la sostenibilidad sin comprometer la competitividad del sector. Esto podría incluir incentivos para la adopción de tecnologías limpias, apoyo financiero para la transición ecológica de las pymes, y una hoja de ruta clara y realista para la implementación de las nuevas medidas.

Hacia un futuro sostenible en la industria alimentaria

A pesar de los desafíos, la jornada organizada por FIAB ha puesto de manifiesto el compromiso del sector con la sostenibilidad. Se han discutido diversas iniciativas ya en marcha para reducir el desperdicio alimentario, mejorar la gestión de residuos y aumentar la eficiencia energética en toda la cadena de valor alimentaria. Estas acciones demuestran que la industria no solo responde a las exigencias regulatorias, sino que también busca proactivamente soluciones innovadoras para los retos ambientales.

El cambio climático se presenta como uno de los mayores desafíos para el sector, afectando desde la producción de materias primas hasta la logística y el consumo final. La industria reconoce la necesidad de adaptarse a estas nuevas realidades climáticas, invirtiendo en investigación y desarrollo para crear productos y procesos más resilientes y sostenibles.

La transición hacia una industria alimentaria más sostenible requiere de un esfuerzo conjunto de todos los actores involucrados. Desde la FIAB se hace un llamado a la colaboración entre empresas, gobierno, sector académico y sociedad civil para desarrollar soluciones innovadoras que permitan cumplir con los objetivos de sostenibilidad sin comprometer la viabilidad económica del sector. El futuro de la industria alimentaria española dependerá en gran medida de su capacidad para navegar estos cambios, adaptarse a las nuevas exigencias y liderar la transición hacia un modelo de producción y consumo más sostenible y responsable.

Diego Servente
Diego Servente
Apasionado por la gráfica y la comunicación. Trato de explorar el por qué, el para qué, el dónde, el quién y el cómo de los hechos, ya que es un compromiso con la verdad. Y la verdad lo es todo.

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