sábado, 23 noviembre 2024

Aprovecha al máximo el jamón ibérico y dale una vuelta con estas recetas creativas

El jamón ibérico, un auténtico tesoro gastronómico de nuestra tierra, es sin duda uno de los ingredientes más emblemáticos de la cocina española. Su sabor inigualable y su textura delicada lo convierten en el protagonista indiscutible de cualquier mesa, especialmente en ocasiones especiales. Ya sea en dados, lonchas o en otros formatos, el jamón de pata negra es un lujo que todos queremos disfrutar. Sin embargo, tras una celebración, a menudo nos encontramos con restos que, aunque deliciosos, pueden parecer difíciles de aprovechar.

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Preparación paso a paso

Preparación paso a paso
  1. Infusión de sabor: comienza colocando las virutas de jamón en una sartén junto con la leche. Deja reposar durante 15 minutos para que el jamón suelte su sabor en la leche.
  2. Sofrito de cebolla: mientras tanto, pela y pica finamente la cebolla. Sofríela en otra sartén con un poco de aceite hasta que esté transparente, lo que tomará aproximadamente 3 minutos.
  3. Preparación de la bechamel: añade la mantequilla a la sartén con la cebolla y, una vez derretida, incorpora la harina. Mezcla bien y cocina durante un par de minutos para eliminar el sabor a crudo de la harina.
  4. Incorporación de ingredientes: si la mezcla de jamón y leche ha reposado, viértela en la sartén con la cebolla. Ralla el queso curado y agrégalo a la mezcla. Sazona con sal, pimienta y una pizca de nuez moscada. Cocina a fuego medio, removiendo constantemente, hasta que la mezcla espese, lo que tomará alrededor de 15 minutos.
  5. Enfriar la mezcla: una vez que la mezcla esté espesa y homogénea, retírala del fuego y extiéndela en un plato. Cubre con film transparente y deja enfriar en la nevera durante al menos una hora para que adquiera consistencia.
  6. Formar las croquetas: bate los dos huevos en un bol y coloca el pan rallado en una superficie plana. Saca la mezcla de la nevera y, con una cuchara, forma bolas del tamaño de una nuez. Pasa cada bola primero por el huevo batido y luego por el pan rallado, asegurándote de cubrirlas bien.
  7. Freír las croquetas: calienta suficiente aceite en una sartén a fuego medio-alto. Fríe las croquetas en pequeñas tandas, evitando que se amontonen. Cuando estén doradas y crujientes, retíralas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Alexia Prieto Brito
Alexia Prieto Brito
Licenciada en Comunicación Social con formación en Redacción, SEO, Copywriting, Marketing Digital, Fotografía, Diseño y Community Manager.

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