León, una joya escondida en el corazón de Castilla y León, es una ciudad que no solo se destaca por su rica historia, sino también por su vibrante cultura y su encanto inigualable. Este destino, considerado uno de los más atractivos de la región, ofrece a los visitantes una experiencia sensorial completa que va más allá de lo habitual. Desde su impresionante patrimonio arquitectónico hasta su deliciosa gastronomía, León es un lugar donde cada rincón cuenta una historia y cada sabor deja una huella.
118. Plaza del Grano: un rincón con encanto
La Plaza del Grano es una de las joyas escondidas de León, conocida popularmente por su historia como el antiguo mercado de grano. Si intentas buscarla en Google Maps, es posible que no la encuentres bajo ese nombre, así que es mejor buscarla como Plaza de Santa María del Camino.
Este encantador espacio está empedrado, así que, si planeas visitarlo, es recomendable evitar los tacones. En el centro de la plaza se erige la Iglesia de Santa María del Camino, un hermoso templo del siglo XII. Durante los meses de verano, la plaza se llena de vida gracias a las terrazas y bares que la rodean, convirtiéndola en un lugar ideal para disfrutar de la gastronomía local. Sin embargo, en nuestra visita, nos sorprendió un manto de nieve que le dio un aire mágico y diferente.