Las albóndigas de patata son una deliciosa y saludable variante de las tradicionales albóndigas de carne, perfectas para esta época de entretiempo. Esta versión más ligera es ideal para los meses menos fríos, cuando el cuerpo agradece comidas frescas y menos pesadas. Comer ligero en verano ayuda a mantenernos activos y evitar la sensación de pesadez, permitiendo disfrutar mejor del buen clima y las actividades al aire libre.
9SALSA PARA ACOMPAÑAR
Mientras las albóndigas se están cocinando, puedes preparar la salsa de tomate estilo casero. Si ya la tienes preparada, simplemente caliéntala en una cacerola a fuego lento. Si no, puedes hacer una rápida salsa casera sofriendo cebolla y ajo picados en un poco de aceite de oliva, añadiendo tomates triturados, sal, pimienta y un poco de azúcar para corregir la acidez. Deja que la salsa se cocine a fuego lento durante unos 20 minutos.
Sirve las albóndigas de patata con quinoa bañadas en la salsa de tomate caliente. Para acompañarlas, una ensalada fresca de hojas verdes con aguacate y tomate cherry es una excelente opción. También puedes servirlas con un poco de arroz integral o una rebanada de pan integral tostado. Como bebida, un vino blanco ligero o una limonada casera fresca combinan perfectamente.