Las redes WiFi domésticas son cada vez más comunes, pues cada miembro del hogar suele contar con una serie de dispositivos que requieren estar conectados a Internet para ofrecer un funcionamiento correcto y para que el usuario pueda realizar tareas cotidianas, laborales y/o académicas. Sin embargo, este tipo de servicio suele traer consigo varias vulnerabilidades que, en caso de no tomar las medidas necesarias, podrían acabar significando un conjunto de riesgos para los aparatos que tenemos en casa y para la información que contienen.
Por lo anterior, urge prestarle la atención que merece a nuestra conexión WiFi, pues el hecho de que personas no autorizadas logren conectarse a nuestra red no solo representa menos velocidad a la hora de emplear el servicio, sino que también significa más riesgos para nuestros dispositivos en lo referido a sufrir ciberataques. Así las cosas, a continuación te explicaremos lo que puedes hacer para proteger tu WiFi de intrusos y, por ende, de posibles hackeos.
2Más medidas de seguridad
Una vez hecho lo anterior, nadie podrá visualizar tu red WiFi en el listado de conexiones disponibles, reduciendo así significativamente las posibilidades de que los intrusos se conecten a ella sin que te des cuenta.
De igual manera, emplear cifrado WPA3 o WPA2, establecer una contraseña fuerte, cambiar las credenciales predeterminadas del enrutador y configurar una red de invitados son otras de las alternativas que podrías tener en cuenta para complementar el ocultamiento del SSID y fortalecer mucho más la seguridad de tu conexión WiFi, y por ende, de cada uno de tus dispositivos.