Hoy, Siemens Gamesa tendrá que dar la cara en su Mesa por Empleo y explicar a los sindicatos cómo piensa llevar a cabo el recorte de 430 puestos de trabajo, aproximadamente el 8% de los casi 5.100 que conforman el total de la plantilla de la compañía en España.
Las consecuencias del ajuste de plantilla planeado por Siemens Gamesa ya se conocían desde mayo: la filial eólica del gigante alemán tumbará 4.100 puestos de trabajo en todo el mundo, de los cuales 430, algo más del 11%, están en España.
El ajuste se centrará en el personal de oficina y se repartirá entre los centros que tiene la compañía en Sarriguren, Zamudio y Madrid. En este segmento productivo, la empresa cuenta actualmente con 3.300 empleados, con lo que la reducción afectará al 13% del total.
La celebración de la Mesa, prevista para julio, ha sufrido repetidos retrasos hasta que la primera reunión fue fijada definitivamente para este martes 10 de septiembre en Madrid. En el careo estarán presentes los sindicatos UGT, CCOO y ELA.
MISIÓN: ESTABILIZAR SIEMENS GAMESA
Ya en febrero, la matriz Siemens Energy anunció que reemplazaría al CEO de Gamesa, Jochen Eickholt, y abordaría medidas de reestructuración. Las medidas incluirían nuevos «ajustes de plantilla», con el objetivo de afrontar un plan a largo plazo para el crecimiento rentable de su negocio eólico.
El enésimo consejero delegado arrojado a la ‘picadora de carne’ en que se ha convertido la energética española fue Vinod Philip, el cuarto en ocupar el cargo tras Markus Tacke, Andreas Nauen y el propio Eickholt, desde que se produjo la integración entre Gamesa y la división eólica de Siemens en 2017.
Con este relevo en la cúpula, Siemens Gamesa anunció que pondría en marcha importantes medidas de reestructuración y de desarrollo estratégico a largo plazo con el objetivo de alcanzar un margen operativo de dos dígitos. El objetivo de estas medidas es alcanzar el punto de equilibrio (break-even) en 2026 y volver a la rentabilidad a partir de entonces.
en 2016, su último año como empresa independiente, Gamesa registró un beneficio de 477 millones de euros. Estas ganancias no han hecho sino evaporarse desde el desembarco de siemens energy en su capital
Esta ‘hoja de ruta’, que lleva meses trazada, ha tenido a los trabajadores de la empresa con el alma en vilo desde hace casi un año. El camino que ha llevado a la reunión de hoy comenzó hace ocho años y tiene mucho que ver con las dificultades inherentes a la industria eólica, pero también con la inoperancia de Siemens Energy a la hora de ponerse a los mandos de su filial española.
SIEMENS Y GAMESA, UN MATRIMONIO MAL AVENIDO
Bien es cierto que la disminución de la demanda, los cambios regulatorios y la competencia internacional han generado un entorno complejo para las empresas del sector. Sin embargo, en 2016, su último año como empresa independiente, Gamesa registró un beneficio de 477 millones de euros. Estas ganancias no han hecho sino evaporarse a un ritmo cada vez mayor desde el desembarco germano en su capital.
El año pasado, Siemens Energy anunció problemas de calidad en los modelos de turbinas eólicas 4X y 5X de Siemens Gamesa, que le arrastraron a unas pérdidas de más de 4.500 millones de euros en su ejercicio fiscal de 2023 y a que el Estado alemán tuviera que salir a su rescate.
Así, en noviembre del año pasado Siemens Energy acordó una ayuda en la que Gobierno germano garantizará 7.500 millones de euros de un importe total de 12.000 millones de euros de garantías, de los cuales 11.000 millones de euros se proporcionarán a la compañía a través de un consorcio de bancos.
LAS FUENTES INTERNAS DE GAMESA SIEMPRE HAN SEÑALADO A LA MALA GESTIÓN DE LA MATRIZ COMO LA PRINCIPAL CAUSA DE LOS PROBLEMAS DE LA EÓLICA
Los malabares financieros no resolvieron los problemas estructurales de Gamesa, cuyos productos seguían provocando una incidencia tras otra. Las fuentes internas señalaban como causas de este pésimo desempeño a la deslocalización productiva y a la deficiente gestión llevada a cabo desde la matriz.
Según las fuentes consultadas por MERCA2, Siemens está en la raíz de todos los problemas. Este medio se puso en contacto con la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT Navarra (UGT-FICA), cuyos representantes fueron categóricos al señalar la «mala gestión de Siemens Energy» y el «propósito de desinversión en los activos no estratégicos de Siemens Gamesa» como las claves del via crucis de la eólica.
Esa es la música que probablemente sonará hoy en la reunión con los representantes sindicales, en la que Siemens Gamesa tendrá que defender un plan estratégico que dejará en la calle a más de cuatro centenares de trabajadores españoles.
Entre las pocas novedades positivas de las que podrá presumir la dirección, está la reintroducción en el mercado de su turbina SG 4X, tras haber restringido su comercialización hace aproximadamente un año. El pasado viernes, con la Mesa de Empleo en ciernes, Gamesa anunció que los problemas técnicos que habían llevado a su retirada habían sido solventados.
