Cada cierto tiempo, surgen tendencias que marcan el rumbo de la televisión. Un ejemplo podrían ser los realities, con explosiones de formatos a primeros de los 2000, o los biopic, que no dejan de surgir durante los últimos años. Dentro de estas tendencias podríamos nombrar las series turcas, que desde hace años están presentes en nuestras televisiones, con distintos picos de éxito. Pero, ¿por qué triunfan tanto? Descubrimos las claves.
5Un humor muy blanco y buenos valores
Una de las grandes características de las series turcas es su sutil forma de mostrar el amor, el sexo y la violencia entre sus personajes. A diferencia de las ficciones españolas, latinoamericanas o estadounidenses, las otomanas tienen una manera tremendamente delicada de abordar estos asuntos, lo que las hace aptas para un mayor público. Una manera diferente de mostrar temas delicados que ha conquistado a los espectadores.
Además, el humor que muestran estas historias es muy distinto a lo que solemos ver en otras producciones, apostando siempre por unas situaciones llenas de inocencia e incluso ingenuidad. En ningún momento escuchamos palabras malsonantes ni soeces, por lo que pueden emitirse en cualquier franja horaria.
Por otro lado, quien haya visto una serie turca sabrá que incluye estupendos valores en los que la bondad, la familia y los amigos están por encima de todo. Solemos ver buenas dosis de solidaridad entre los protagonistas, y de hecho, el bien casi siempre gana al mal al final de la historia. Podemos poner como ejemplo ‘Hermanos’, con determinados personajes que siempre se mantienen unidos ante la adversidad, o ‘Stiletto Vendetta’, en la que incluso algunos de los más villanos acababan optando por el buen camino.
