Descubre el auténtico sabor de las Islas Canarias con esta deliciosa receta de carne de cabra compuesta. Sumérgete en la rica tradición culinaria canaria y aprende a preparar este plato típico que combina sabores únicos y una historia llena de tradición. No te pierdas la oportunidad de sorprender a tus seres queridos con esta receta que trae el espíritu de las islas a tu mesa. ¡Sigue leyendo y conviértete en un experto en la cocina canaria!
6Sigue cada una de estas recomendaciones
- Dorar la carne: comienza dorando la carne de cabra en aceite de oliva virgen a fuego vivo. Este paso es crucial para sellar los jugos y obtener una textura jugosa.
- Salar y retirar: una vez dorada, sala la carne al gusto y retírala de la cazuela. Esto permitirá que continúes con la preparación de la base del guiso.
- Sofrito de cebolla: en el mismo aceite, agrega la cebolla finamente picada y sofríela a fuego suave hasta que esté transparente, liberando todos sus aromas.
- Incorporar el ajo: añade los ajos previamente majados y dales unas vueltas junto con la cebolla, para que se mezclen bien y potencien el sabor del sofrito.
- Reducir el tomate: agrega el tomate triturado y cocina hasta que el líquido se reduzca un poco, concentrando los sabores.
- Añadir especias: incorpora el pimentón dulce, el orégano, los clavos de olor y el comino molido, mezclando todo para que las especias impregnen el sofrito con su sabor.
- Incorporar zanahorias: añade las zanahorias troceadas, que aportarán dulzura y textura al guiso.
- Regresar la carne: devuelve la carne de cabra dorada a la cazuela junto con todos sus jugos, permitiendo que se mezclen con los demás ingredientes.
- Mojar con vino: vierte el vino blanco sobre la preparación, lo que ayudará a desglasar la cazuela y aportará un toque ácido que balanceará los sabores.
- Añadir laurel y agua: incorpora las hojas de laurel y cubre la carne con agua. Esto permitirá que la carne se cocine de manera uniforme y absorba todos los sabores.
- Estofar: cocina a fuego lento durante al menos una hora y media, o hasta que la carne esté tierna. Es importante que mantengas la cazuela tapada durante este proceso.
- Reposo: una vez cocida, deja reposar la carne tapada durante una hora para que los sabores se asienten, y luego sirve. Este paso es clave para intensificar los sabores y obtener un guiso más sabroso.