sábado, 14 septiembre 2024

Deutsche Bank: Europa y EE.UU. pierden por goleada la batalla renovable contra China

En todo lo referente a la implantación y desarrollo de energías renovables, primero está China, seguida de China, en tercer lugar China y, después, todos los demás. La sucesión de informes e investigaciones que evalúan la impronta del país asiático en este mercado solo arrojan una conclusión: que la aplastante hegemonía del ‘gran dragón’ frente al resto del mundo, lejos de remitir, se está agigantando.

Según un estudio de Deutsche Bank, el uso de fuentes limpias para generar electricidad, impulsado por los objetivos climáticos fijados por la comunidad internacional, está aumentando en todo el mundo, con la solar fotovoltaica como punta de lanza. El banco, citando datos de Ember, un grupo de expertos en energía, señala que en 2023 la capacidad mundial instalada de energía solar aumentó un 36%, superando significativamente el crecimiento de la capacidad de otras fuentes alternativas de electricidad.

En la Unión Europea (UE), la generación de electricidad a partir de energía eólica y solar en los primeros seis meses de 2024 superó por primera vez a la generación de electricidad a partir de combustibles fósiles, con 385,6 teravatios hora (TW/h) frente a los 343,5 TW/h de los hidrocarburos. La transición energética parece estar en el buen camino, especialmente en la UE; pero cuando las cifras chinas entran en juego, cualquier logro queda empequeñecido.

CHINA, LA APISONADORA ‘VERDE’

De hecho, si 2023 fue un año histórico en generación renovable a nivel global fue debido a la colosal aportación de China a la oferta.

El año pasado, el país instaló un 55% más de capacidad solar que en 2022. Esta marca pulveriza el crecimiento del 12% registrado en conjunto por el G7 (grupo formado por los estados más industrializados del mundo: Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos). El resto del mundo se queda aún más lejos, con un 5,9% más de potencia solar nueva en 2023.

La capacidad de energía eólica de China también aumentó sustancialmente (21%), en comparación con el 4,5% del G7 y el 5,3% del resto del mundo. Esto significa que durante el pasado ejercicio China fue responsable del 63% de las nuevas capacidades solares del mundo y del 65% del crecimiento de la capacidad eólica.

Lo que está impulsando este rápido desarrollo en China, según la interpretación de Deutsche Bank, es que la industria solar se está beneficiando de los subsidios gubernamentales que permiten precios bajos para los paneles solares.

LAS CIFRAS DE PROYECTOS EN DESARROLLO CONSTATAN QUE EL DESTACADÍSIMO LIDERAZGO DE CHINA SEGUIRÁ VIGENTE: EL PAÍS ASIÁTICO tiene actualmente en construcción 339 GIGAVATIOS de potencia eólica y solar, más que el resto del planeta en conjunto

Los autores del estudio vaticinan que este año el dominio chino seguirá acentuándose, a tenor de los datos de implantación correspondientes al primer semestre de 2024: la Administración Nacional de Energía de China (ANE) estima que la capacidad fotovoltaica del país aumentó en 123 gigavatios (GW) entre enero y julio. Esto elevó la capacidad fotovoltaica total del país a 740 GW, un aumento de alrededor del 50%, mientras que la nueva capacidad de energía eólica fue de alrededor de 470 GW, incrementándose un 20%.

En cuanto a los proyectos que aún se están ‘cocinando’, otro informe de Global Energy Monitor indica que el país oriental tiene actualmente en construcción 339 GW de potencia eólica y solar, más que el resto del planeta en conjunto.

Grenergy completa la venta sus activos eólicos en Perú por más de 55 millones

Paralelamente a su patrocinio de la explosión renovable, China ha propinado un severo recorte a la generación térmica: Global Energy Monitor destaca que en la primera mitad de 2024, China redujo los permisos de energía del carbón en un 83% en comparación con los seis primeros meses de 2023, autorizando solo nueve GW de nueva capacidad.

Este mareante cóctel de cifras lleva a la inmensa mayoría de voces autorizadas a concluir que el dictatorial liderazgo chino en energías limpias se mantendrá indiscutido y creciente. La Agencia Internacional de la Energía (AIE) admite que «es poco probable que los proyectos anunciados [en el resto del mundo] cambien significativamente la alta concentración geográfica [en China] de la cadena de suministro fotovoltaica en general».

LA UE SE PROTEGE FRENTE A LA INVASIÓN DE LOS FABRICANTES CHINOS

La UE ha reconocido los peligros que podrían surgir en el sector fotovoltaico como resultado de la excesiva dependencia de China, país que aporta el 97% de los paneles solares importados por la Unión. Los fabricantes de paneles solares estadounidenses, por el contrario, tienen sus ganancias protegidas por barreras comerciales y beneficios fiscales.

Por este motivo, el 15 de abril de 2024 se firmó la llamada Carta Solar Europea. En ella, se establecen las medidas inmediatas que deben adoptar la Comisión, los estados miembros de la UE y los representantes de la cadena de valor fotovoltaica, incluidos los sectores mayoristas, de distribución y de fabricación, «para garantizar el pleno cumplimiento de las normas de competencia y de ayudas estatales de la UE».

España y los otros 22 estados miembros que se vincularon a la Carta se comprometieron en Bruselas a tomar todas las medidas necesarias para proteger a los fabricantes, incluyendo flexibilizar los requisitos para acceder a las ayudas estatales y comunitarias.

LA CARTA SOLAR EUROPEA ESTABLECE PARA LOS 23 ESTADOS FIRMANTES, ENTRE ELLOS ESPAÑA, la obligación de promover un suministro resistente de productos fotovoltaicos solares sostenibles de alta calidad en EL CONTINENTE

El texto establece para los países firmantes la obligación de promover un suministro resistente de productos fotovoltaicos solares sostenibles de alta calidad en Europa, a través de la creación de condiciones marco favorables para las instalaciones de fabricación de productos fotovoltaicos y para inversiones adicionales.

En este sentido, han acordado «considerar la posibilidad de utilizar todas las oportunidades de financiación de la UE disponibles, así como las flexibilidades previstas en el Marco Temporal de Crisis y Transición de ayudas estatales, para apoyar nuevas inversiones en la cadena de suministro de energía solar».

Por su lado, la Comisión Europea tiene la intención de «facilitar aún más el acceso a la financiación de la UE para proyectos de fabricación de energía solar fotovoltaica» en el marco del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, fondos estructurales o fondos destinados a la investigación.


- Publicidad -