Valladolid es la capital olvidada del imperio español. Cuando pensamos en las grandes capitales del mundo, es común que nombres como Madrid, París o Londres vengan a la mente. Sin embargo, la historia está llena de sorpresas y matices que nos revelan un pasado fascinante.
8Un momento de prosperidad
En el contexto de su designación como capital, Valladolid era una ciudad próspera, con un crecimiento demográfico significativo que la llevó de tener 30,000 a 70,000 habitantes. Este aumento en la población reflejaba no solo el atractivo de la ciudad, sino también su importancia en la política y la cultura de la época. Durante este período, Valladolid fue el lugar de nacimiento de figuras clave, como el futuro rey Felipe IV y su hermana Ana de Austria, quien más tarde se convertiría en reina de Francia.
La capitalidad de Valladolid también atrajo a importantes personalidades literarias y culturales. Escritores como Miguel de Cervantes y Francisco de Quevedo encontraron en la ciudad un ambiente propicio para el desarrollo de sus obras. Este florecimiento cultural no solo enriqueció la vida intelectual de Valladolid, sino que también contribuyó a su reputación como un centro de creatividad y pensamiento.