En un momento en que la economía española se enfrenta a diversos desafíos, las federaciones de Industria de UGT y CCOO han decidido tomar medidas contundentes para defender los intereses de los trabajadores del sector de la industria azucarera y de levaduras. Estas organizaciones sindicales han convocado una serie de movilizaciones en todo el país, con el objetivo de lograr un convenio colectivo «justo, equilibrado y digno» para los empleados de este importante sector industrial.
Según los sindicatos, el origen de estas movilizaciones radica en el «bloqueo» por parte de las patronales del sector para llegar a un acuerdo en la negociación del convenio colectivo. Durante los últimos años, las empresas de la industria azucarera y de levaduras han registrado importantes beneficios en sus cuentas, mientras que los trabajadores han sufrido una pérdida de poder adquisitivo cercana al 10%. Frente a esta situación, los sindicatos consideran inaceptable que las patronales no garanticen el poder adquisitivo futuro de los empleados ni compensen las pérdidas de los ejercicios anteriores.
Rechazo a la Última Propuesta de las Patronales
En la última reunión del convenio colectivo, las patronales presentaron una «última y definitiva» propuesta que, según los sindicatos, no cumple con las expectativas de los trabajadores.
Específicamente, los representantes de CCOO y UGT han manifestado que es «inasumible e inaceptable» que el nuevo convenio no incluya una cláusula de revisión salarial ni una paga de compensación por las pérdidas de poder adquisitivo sufridas en el convenio anterior, especialmente cuando las empresas siguen obteniendo importantes beneficios.
Calendario de Movilizaciones
Para hacer valer sus demandas, los sindicatos han convocado una serie de concentraciones y movilizaciones en diferentes puntos del país, donde estarán presentes los trabajadores del sector. Estas acciones comenzarán el 10 de septiembre en Olmedo (Valladolid) ante la cooperativa ACOR, y se extenderán hasta los primeros días de octubre en las plantas de AB Azucarera y Lesaffre en Burgos, Valladolid, Córdoba, Cádiz y León.
Los sindicatos han dejado claro que la conflictividad en el sector solo se puede evitar si las patronales asumen su responsabilidad y acceden a distribuir parte de sus resultados económicos entre los trabajadores, quienes han demostrado su compromiso en situaciones complejas. Este pulso entre los agentes sociales pone de manifiesto la importancia de alcanzar un equilibrio justo en las condiciones laborales de un sector clave para la industria alimentaria española.