El estreno de Carlos Latre en el access prime time ha resultado tan decepcionante para Mediaset España como esperado en el sector, tal y como avanzó Merca2.es, ya que la figura del imitador no generaba demasiada inquietud en sus rivales al competir en una complicada franja horaria que es hegemonizada por los contrastados ‘El Hormiguero 3.0’, ‘First Dates’ y ‘El Intermedio’, y en la que irrumpirá en los próximos días el emergente David Broncano.
‘Babylon Show’, con el campechano y crecido Luis de la Fuente como primer invitado estrella, arrancó con un muy discreto 10,1% de share. El dato no es para tirar cohetes, pero torna en dramático el resultado en conciencia directa contra una reposición de ‘El Hormiguero 3.0’ (que venció con un 9,6% de share frente al 9,5% de Telecinco).
A Latre no se le conocen éxitos en solitario en televisión como primer espada (‘El Mundo de Chema’, ‘Réplica’, ‘La escobilla nacional’, ‘Letris’ o ‘Uno de los nuestros’), pero al nuevo CEO de Mediaset España Alessandro Salem le cegó el éxito que obtuvo Telecinco hace unos meses con el reencuentro de ‘Crónicas Marcianas’, coprotagonizado y producido por el castellonense.
PALOS
Jimina Sabadú destroza en El País al frío estreno de ‘Babylon Show’. «Estéticamente, Babylon Show es el Telecinco de 1991. Espiritualmente, es una sesión de fotos en un barco en Menorca. Moralmente, es Mediaset. Y estratégicamente, es la competencia de Motos, sí, pero también de Atresmedia, a quien le han levantado unos cuantos nombres, empezando por el del propio Latre. Es una técnica que antaño utilizaba Atresmedia con Mediaset. Las vueltas que da la vida», asegura.
«La entrevista a Luis de la Fuente ha vertebrado el programa, pero los pasos a los sketches no han funcionado, porque los propios sketches no funcionaban. La visita de Sardá ha sido menos emotiva de lo que pretendía, y el cierre con Margarita Álvarez, experta en felicidad (quien, por supuesto, es de marketing y MBA, no de psicología ni de psiquiatría) era innecesario», añade la crítica televisiva.
Daniel Llagüeri, en El Debate, afirma que «un programa como ‘Babylon Show’ no puede sustentarse en una entrevista, sin chispa, con aderezos cómicos a lo largo de una hora. O las preguntas levantan titulares estilo Pablo Motos o estilo Broncano (dos preguntas de sexo y dinero en el banco) o las respuestas se pierden entre imágenes. En este primer programa se detecta que a Carlos Latre alguien le ha aconsejado que imite poco y dirija. Ese puede ser su error».
Diego López, en Fórmula TV, es más indulgente sobre el show: «¿Ha sido ‘Babylon Show’ un programa innovador? En absoluto. ¿Ha tenido algunos momentos casposos? Seguramente. Pero no hay que perder de vista que ‘El hormiguero’ es precisamente eso más las opiniones políticas de su presentador».
LAS REDES SENTENCIAN A LATRE
«Le doy un mes en antena, semejante despropósito parece un programa de los 90», «sobreactuado» y «¿Por qué tanta caspa en pleno 2024, por Dios?», fueron algunos de los hirientes comentarios que se leyeron en X.
No es la primera apuesta naif de la nueva Mediaset España, que en los últimos tiempos ha articulado shows desfasados como ‘Desnudos por la vida’, ‘La vida sin filtros’ de Cristina Tárrega, el show de canicas ‘A tu bola’ o el encomiable ‘100% Únicos’.