La industria de las motocicletas en España presenta un panorama dinámico y en constante evolución, reflejando tanto las tendencias de movilidad urbana como las preferencias de los consumidores en cuanto a vehículos de dos ruedas. Según un reciente estudio realizado por la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (Unespa), a través de su programa «Estamos Seguros», el parque de motocicletas en el país ibérico asciende a 3,7 millones de unidades, ofreciendo una visión detallada de su composición y características.
Este análisis no solo revela datos significativos sobre la edad y tipos de motocicletas que predominan en las carreteras españolas, sino que también arroja luz sobre los perfiles de los conductores y las tendencias en la obtención de licencias. La información proporcionada por Unespa ofrece una perspectiva valiosa para comprender mejor el mercado de las motocicletas en España, sus particularidades y cómo se compara con otros segmentos del sector automotriz, como el de los automóviles.
Juventud y diversidad en el parque de motocicletas español
Uno de los aspectos más destacables del estudio es la relativa juventud del parque de motocicletas en España. El 42% de las motocicletas en circulación tiene menos de 10 años, lo que contrasta significativamente con la edad media de los turismos, que se sitúa en 13 años y 4 meses. Esta diferencia subraya una tendencia hacia la renovación más frecuente en el sector de las dos ruedas, posiblemente impulsada por avances tecnológicos y cambios en las preferencias de los consumidores.
La distribución por edad de las motocicletas en España muestra un panorama interesante. Un 24% del parque tiene menos de 4 años, lo que indica una fuerte incorporación de modelos nuevos en los últimos años. Otro 18% se sitúa entre los 4 y 10 años de antigüedad, conformando así ese 42% de motocicletas relativamente jóvenes. Esta tendencia hacia vehículos más recientes podría explicarse por factores como la búsqueda de mayor eficiencia energética, mejores prestaciones en seguridad o simplemente una preferencia por modelos más modernos y equipados.
Es notable también la escasa presencia de motocicletas con más de 25 años en las carreteras españolas. Las denominadas «motos clásicas» representan apenas el 8% del total del parque móvil de dos ruedas. Este dato sugiere que, a diferencia de otros países donde existe una fuerte cultura de preservación y uso de motocicletas vintage, en España predomina una inclinación hacia modelos más recientes. Esto podría deberse a regulaciones más estrictas en materia de emisiones, a la búsqueda de mayor seguridad o simplemente a preferencias estéticas y funcionales de los conductores españoles.
Predominio de las motocicletas urbanas y de baja cilindrada
Contrariamente a lo que podría pensarse, las motocicletas de alta cilindrada no son las más comunes en España. El estudio de Unespa revela que solo el 30% del parque corresponde a motos con una cilindrada superior a 500 centímetros cúbicos. Estas incluyen modelos deportivos, choppers, multipropósito, naked y de gran turismo, que se asocian generalmente con un uso más recreativo o para viajes de larga distancia.
La mayoría del parque de motocicletas en España está compuesto por vehículos de vocación urbana, lo que refleja las necesidades de movilidad en las ciudades españolas. Las motocicletas de 125 cc son las más numerosas, constituyendo el 37% del parque asegurado. Esta predominancia se puede atribuir a varios factores, como su facilidad de manejo en entornos urbanos congestionados, su menor consumo de combustible y, en muchos casos, la posibilidad de conducirlas con el permiso de conducir de coche tras una antigüedad mínima.
Los ciclomotores, con una cilindrada de 50 cc, representan el 14% del parque, mientras que las cilindradas intermedias (250 cc, 300 cc) agrupan el 20% restante. Esta distribución subraya la importancia de las motocicletas como solución de movilidad urbana, ofreciendo una alternativa ágil y eficiente para desplazamientos en ciudad. La preferencia por cilindradas menores también puede estar influenciada por factores económicos, como menores costos de adquisición y mantenimiento, así como por regulaciones urbanas que favorecen vehículos menos contaminantes.
Perfil del conductor de motocicleta en España
El análisis de Unespa proporciona datos reveladores sobre quienes están detrás del manillar de las motocicletas en España. Un dato particularmente llamativo es la marcada predominancia masculina en este sector: el 88% de los titulares de pólizas de seguro de moto son hombres, frente a solo un 12% de mujeres. Esta disparidad de género en el uso de motocicletas plantea interrogantes sobre los factores culturales, sociales o económicos que pueden estar influyendo en esta distribución.
En cuanto a la experiencia de conducción, se observa una distribución variada. Un 6,7% de los conductores tiene menos de 4 años de experiencia en moto, lo que sugiere un flujo constante de nuevos motociclistas incorporándose a las carreteras. El grupo de conductores con entre 5 y 9 años de carnet representa el 7,6%, mientras que aquellos con entre 10 y 15 años de permiso constituyen el 16%. La mayoría de los conductores, sin embargo, cuenta con más de 15 años de experiencia, lo que indica una base sólida de motociclistas experimentados en las carreteras españolas.
Es importante destacar el cambio en el sistema de licencias para conducir motocicletas que se implementó en 2009. Este nuevo sistema subdivide los permisos en cuatro categorías (AM, A1, A2 y A) en función de la potencia del vehículo y la edad del conductor. Esta estructura escalonada busca asegurar que los conductores adquieran experiencia gradualmente antes de pasar a motocicletas más potentes, lo que representa un enfoque en la seguridad vial. Antes de los años noventa, obtener el carnet de coche automáticamente habilitaba para conducir motocicletas de todas las cilindradas, un sistema que ha evolucionado significativamente para adaptarse a las necesidades de seguridad y regulación actuales.