Hace algunas semanas, hablamos sobre los comentarios de Noland Arbaugh, primer paciente de Neuralink, compañía propiedad de Elon Musk dedicada a la neurociencia, acerca de cómo el chip que le implantaron en el cerebro lo ha ayudado enormemente a desempeñar tareas que antes parecían imposibles para él. Ahora, el empresario sudafricano ha dado a conocer que su startup (empresa emergente) ya ha realizado su segundo implante cerebral.
El objetivo principal de la empresa de Elon Musk radica en ayudar a las personas con lesiones en la médula espinal, por medio de chips para el cerebro, a recuperar parcialmente su autonomía; asunto que, por el momento, ha sido todo un éxito en el caso de su primer paciente. Ahora bien, con base en esto y en una serie de cambios en el procedimiento, Neuralink obtuvo el visto bueno para llevar a cabo una segunda prueba.
2Un éxito que esconde oscuridad
A pesar de que los dos primeros grandes pasos de Elon Musk en el mundo de la neurociencia están siendo exitosos, lo cierto es que detrás de esto hay una gran variedad de aspectos turbios a tener en cuenta. Uno de ellos tiene que ver con la acusación por parte del Comité de Médicos por una Medicina Responsable en el 2022 por torturar a monos como sujetos de prueba, así como la demanda de un exempleado de Neuralink, quien dijo haber trabajado en un entorno laboral discriminatorio y hostil.
Finalmente, restándole importancia a lo anterior y centrándose únicamente en lo positivo, Elon Musk ha confirmado que Neuralink planea realizar otras ocho pruebas en lo que resta del 2024, eso sí, si la aprobación regulatoria llega a tiempo. Veremos qué tanto se sigue perfeccionando el procedimiento de este tipo de implantes y cómo beneficiarán a futuros pacientes.