Bajo un panorama donde una de las mayores preocupaciones relacionadas con la inteligencia artificial (IA) tiene que ver con el potencial reemplazo del ser humano por parte de estas herramientas, OpenAI y ChatGPT parecen haber logrado, de la mano con Synchron, un avance que tal vez nadie esperaba: la integración de un chatbot en el cerebro de una persona; novedad que fortalece la característica de complementariedad entre la IA y el humano.

Tal vez esta conexión entre ChatGPT y el cerebro humano es lo más cercano al súperhumano (al menos en términos intelectuales) que hayamos visto jamás, por lo que, en caso de seguir avanzando en la materia y perfeccionando las técnicas, podríamos estar cerca de alcanzar, como especie, el clímax máximo en lo referido al conocimiento.
1Una alianza con ChatGPT como punto central

Synchron, empresa dedicada a la neurotecnología y abierta competidora de Neuralink, compañía del mismo sector propiedad de Elon Musk, recientemente oficializó una alianza histórica con OpenAI, dueña de ChatGPT, para la integración de esta herramienta de IA en sus interfaces cerebro-computadora. Similar a lo que busca la empresa de Musk, Synchron pretende contribuir al fortalecimiento de la autonomía y de la comunicación en personas con serias limitaciones de movilidad.
Uno de los pacientes de Synchron ya ha experimentado lo que se siente tener a ChatGPT en el cerebro, lo cual, según sus palabras, le ha ayudado a ahorrar tiempo y energía, así como a reducir el estrés, dando paso a comunicaciones más fluidas y eficientes, gracias a la posibilidad de seleccionar respuestas generadas por este chatbot.