BBVA ‘refuerza’ la posición del Gobierno contra la fusión con Banco Sabadell

BBVA, que tiene como CEO a Onur Genç, ha dado la primera pista sobre el ajuste que realizará si consigue sacar adelante la opa sobre Banco Sabadell y la fusión: 300 sucursales menos, un ajuste que evidentemente tendrá repercusión en empleo. El Gobierno tiene clara su posición, pero la información a vuelapluma que ha dado la entidad que preside Carlos Torres Vila, refuerza la negativa del Ejecutivo que encabeza Pedro Sánchez a autorizar la absorción. La postura que tenemos está clara desde el principio y no ha cambiado”, dijeron a MERCA2 fuentes del Ministerio de Economía.

El Gobierno considera que, entre otras cosas, la unión entre BBVA y Banco Sabadell será lesiva para la competencia. Por ello no es partidario de la misma y puede vetarla, algo que no puede hacer con la opa sobre Banco Sabadell.

Economía tiene la última palabra sobre la fusión, pero salvo que las cosas cambien mucho, la decisión está tomada, incluso en contra de lo que puedan opinar el Banco Central Europeo (BCE), Banco de España y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

En este último caso, si Competencia viera todo bien,  el Ejecutivo tendrá complicado ‘vender’ que veta la fusión, pero el tema de la opinión pública no es algo que preocupe al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ya ha demostrado que es capaz de tomar decisiones polémicas y conflictivas sin temblarse el pulso. Otra cosa son las consecuencias.  El que sí tendrá más problemas para explicarlo desde un punto técnico, es el titular de Economía, Carlos Cuerpo, que, no es un político, sino precisamente un técnico, de élite, pero técnico.

bbva y las oficinas

Mientras llega ese momento, para el cual falta, el Gobierno sigue defendiendo su posición.  En esta ocasión MERCA2 habló con fuentes del Ejecutivo para ver cómo valoraban la actualización de datos de BBVA sobre la unión con Banco Sabadell.

En la presentación ante analistas, BBVA desveló que planea cerrar 300 oficinas bancarias una vez que se haga con Banco Sabadell y lo fusione. Estas 300 sucursales suponen cerca del 35% de las 870 que el banco calcula que están localizadas a menos de 500 metros.

BBVA desveló que planea cerrar 300 oficinas bancarias si sale la fusión con Banco Sabadell

El BBVA cuenta, a cierre del primer semestre, con 5.872 oficinas, mientras que el Banco Sabadell atesora 1.382. Es decir, el banco combinado tendría unas 7.254. De acuerdo a los planes difundidos por el banco de origen vasco, cerrar 300 supondría mermar la red comercial de ambos bancos en apenas un 4%.

Este punto, por más que Carlos Torres insiste en que no tendrá una gran repercusión en materia de empleo,  refuerza la posición del Gobierno a la hora de defender su negativa a la fusión, por más que el presidente de BBVA insista en que serán ajustes pactados y sin despidos, sino con salidas acordadas, lo que se encuadra en el término “bajas no traumáticas”.

la fuerza

Además, el hecho de que BBVA anticipe una previsión de cierres contribuye a dar más fuerza a lo que en Banco Sabadell llaman la parte emocional, en la que quedan envueltos, empresas, clientes, trabajadores y accionistas (por separado y en conjunto) a la hora de no acudir a la opa, de defender que Banco Sabadell siga en solitario.

el hecho de que BBVA anticipe una previsión de cierres contribuye a dar más fuerza a lo que en Banco Sabadell llaman la parte emocional

Este es un punto clave a la hora de que la opa salga o no, pues si los minoristas no acuden a la opa, con el porcentaje que tienen, se lo pondrán muy difícil a BBVA.

Si la opa no sale, el presidente de BBVA, Carlos Torres, y el Ceo, Onur Genç, quedarán en una posición complicada y estaría por ver si tendría algún tipo de repercusión, aunque fuentes del sector creen que si pasase algo sería porque Torres diera un paso adelante y no porque el consejo le pidiera la dimisión si no sale la opa. Sería su segundo fracaso a la hora de intentar una fusión con Banco Sabadell.

El banco ya cuenta con el sí de la junta de accionistas, que se celebró a inicios de mes, así como de las autoridades de competencia de EE UU, Francia, Portugal y Marruecos, así como anuncia que ha presentado ya la documentación ante la regulador bursátil de Estados Unidos (SEC).

Aún tiene que conseguir el visto bueno del Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Después hay  un plazo de 70 días de aceptación. El banco echa sus cálculos sobre cuándo hará pública su posición la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC). El punto en el que están muchos analistas es si BBVA puede echar marcha atrás si Competencia les presenta unas exigencias que hagan inviable, por falta de rentabilidad.