La incidencia ocurrida el lunes en la estación de Chamartín (Madrid) afectó principalmente al eje de Levante, obligando a la suspensión de un tren procedente de Alicante. Sin embargo, el resto de los trenes lograron llegar a su destino final, a pesar de los retrasos registrados.
Los presidentes de Renfe y Adif, Raül Blanco y Ángel Contreras, respectivamente, informaron sobre los detalles de este incidente durante una rueda de prensa celebrada este martes. Según sus declaraciones, la normalidad se restableció en la estación de Chamartín-Clara Campoamor hacia las 22:00 horas de la noche.
Gestión de la Incidencia por las Operadoras Ferroviarias
Ante la interrupción del servicio, Renfe puso en marcha un servicio alternativo en autobús tanto para los usuarios de la red de Cercanías como para los viajeros de Media Distancia. Además, la compañía reforzó el despliegue de auxiliares y miembros de seguridad en la estación de Chamartín para atender a los pasajeros afectados, a quienes se les proporcionó agua y se les mantuvo informados sobre el avance de la incidencia.
Por su parte, Adif destacó que la ampliación del vestíbulo de la estación de Chamartín facilitó la actuación de los miembros de seguridad, quienes tuvieron como objetivo evitar aglomeraciones y controlar el flujo de entrada a las zonas de embarque. Asimismo, la compañía solicitó la presencia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en los alrededores de la estación.
Impacto en la Operación Ferroviaria
Según la información proporcionada, un total de 46 trenes se vieron afectados por la incidencia, de los cuales 39 eran de Larga Distancia y Alta Velocidad, mientras que 7 eran de Media Distancia. Estos trenes promediaron un retraso de alrededor de 50 minutos, aunque lograron cumplir con su servicio.
El único tren que tuvo que suspender su circulación era el procedente de Alicante, cuyos pasajeros fueron acomodados en otro tren que circuló en doble composición. Tanto la estación de Atocha como la de Chamartín permanecieron abiertas hasta las 2:30 de la madrugada, cuando llegó el último tren a Atocha desde Alicante.
