El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha aprobado recientemente un Proyecto de Ley que introduce una serie de nuevas deducciones y bonificaciones con el objetivo de facilitar el acceso a la vivienda para los residentes de la región. Esta iniciativa, vinculada al Pacto Regional por la Vivienda, supondrá un ahorro de 118 millones de euros anuales tanto para la compra como para el alquiler de una casa, beneficiando a cerca de medio millón de madrileños.
La propuesta, que se registrará esta semana en la Asamblea de Madrid, se centra principalmente en modificaciones al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Estas medidas tienen como fin amortiguar el impacto de la inflación y las crecientes tasas de interés en los préstamos hipotecarios, así como fomentar el repoblamiento de los municipios rurales de la región.
DEDUCCIONES PARA ARRENDADORES Y PROPIETARIOS
Una de las principales novedades es la deducción de 1.000 euros por el arrendamiento de viviendas vacías. Esta medida, dirigida a los pequeños propietarios que firmen contratos de al menos tres años, beneficiará a cerca de 20.000 personas y les permitirá ahorrar 20 millones de euros.
Asimismo, se contempla una deducción para amortiguar el incremento de las cuotas de préstamos variables por la subida de tipos, tomando como referencia el euríbor de diciembre de 2022. Este beneficio, con un límite de 300 euros, se aplicará a la vivienda habitual siempre que su valor no supere los 390.000 euros y la renta familiar per cápita no exceda los 30.930 euros. Se estima que 450.000 hipotecados podrán acogerse a esta medida, con un ahorro de 90 millones de euros.
INCENTIVOS PARA COMBATIR LA DESPOBLACIÓN
Para hacer frente a la despoblación de los municipios rurales (con menos de 2.500 habitantes), la propuesta incluye varias bonificaciones dirigidas a los menores de 35 años. Por un lado, podrán deducirse 1.000 euros independientemente de que compren o alquilen una vivienda en estos municipios. Adicionalmente, los jóvenes que adquieran una propiedad para establecerse de forma permanente en estos pueblos, podrán deducirse el 10% del precio de la vivienda, con un límite anual de 1.546 euros, durante diez ejercicios fiscales. Se calcula que 1.200 ciudadanos se beneficiarán de estas iniciativas, con un ahorro de 1,2 millones de euros.
Finalmente, se contempla una bonificación del 100% en los impuestos de Transmisiones Patrimoniales (ITP) y Actos Jurídicos Documentados (AJD) para la adquisición de viviendas, tanto de segunda mano como de nueva construcción, en estos municipios rurales. El impacto previsto de esta medida es de 7 millones de euros en ahorro para los madrileños.
IMPACTO ESPERADO Y TRAMITACIÓN PARLAMENTARIA
En conjunto, estas nuevas deducciones y bonificaciones se estima que beneficiarán a cerca de medio millón de madrileños, suponiendo un ahorro de 118 millones de euros anuales. La iniciativa, que se encuentra en su práctica totalidad asociada al IRPF, se registrará esta semana en la Asamblea de Madrid para su tramitación parlamentaria, donde se espera que sea aprobada gracias a la mayoría del Partido Popular.
Estas medidas, impulsadas por el Ejecutivo regional, forman parte de un esfuerzo más amplio por facilitar el acceso a la vivienda en la Comunidad de Madrid. Al reducir la carga fiscal, tanto para arrendadores como para compradores y jóvenes que se asientan en zonas rurales, se espera que estas iniciativas contribuyan a aliviar la presión sobre el mercado inmobiliario y fomenten la estabilidad residencial de los madrileños.