La previsibilidad climática en Honduras durante abril, mayo o junio contrasta drásticamente con julio, cuando el huracán Beryl azotó los Cayos. Anoche, los estragos del temporal pusieron al límite tanto a los concursantes como al equipo de Supervivientes All Stars, enfrentándose a condiciones extremas y desafiantes en medio de la competencia por la supervivencia.
1LAS LÁGRIMAS DE SOFÍA SUESCUN EN SUPERVIVIENTES ALL STARS
Anoche, las lágrimas de Sofía Suescun en la palapa de Supervivientes All Stars reflejaban desesperación. Los concursantes, agotados no solo por el hambre, se enfrentan ahora a condiciones climatológicas extremas que están desgastando una edición ya complicada. El entorno se está convirtiendo en un auténtico infierno, donde cada intento por sobrevivir se ve seguido por un nuevo golpe que los deja hundidos, destacando la dureza de una experiencia que desafía los límites físicos y emocionales de los participantes.
En la gala del jueves pasado, Laura Madrueño tuvo que ausentarse brevemente debido a un ataque de tos incontrolable, agravado por un catarro causado por los cambios de temperatura. Anoche, la climatología volvió a hacer estragos en Supervivientes All Stars. Los meses de abril, mayo y junio ofrecen calor sofocante, pero en julio, las tormentas y los bruscos cambios de temperatura son el desafío. Además, el paso del huracán Beryl ha exacerbado las condiciones ya duras de esta edición del programa.
Supervivientes All Stars mostró anoche las consecuencias del paso del huracán en los supervivientes. La playa, destrozada, toda su dotación lona, ropa, aparejos, fuego, destrozada, ellos, destrozados… Sin poder pescar por las condiciones del mar, con toda la playa llena de basura y de escombros, con la madera empapada, sin fuego, sin nada con que cubrirse, sin siquiera una camiseta que ponerse seca y con fuertes vientos y un descenso increíble de las temperaturas. Lo decía anoche Lola: «Pasé toda la noche desnuda con el chubasquero y nada más porque toda mi ropa estaba empapada. No dejaba de tiritar, me moría de frío y pasé toda la noche abrazada a Marta».
«Está cayendo una tormenta descomunal, están los coletazos de este huracán, la cosa no ha terminado. De manera excepcional, me están diciendo que por la climatología vamos a tener que abrir la palapa», anunciaba Sandra Barneda. «Los concursantes están refugiándose para llegar hasta la palapa», avisaba desde el plató.
Tras esto, Laura Madrueño conectaba desde la palapa para describir la situación vivida: «De repente, un aguacero espectacular nos ha obligado a refugiarnos en la palapa. Estamos preparando todo a gran velocidad para conectar con nuestros supervivientes«. Cuando finalmente lograron establecer la conexión, el sonido ensordecedor del agua golpeando la palapa era abrumador. Las lágrimas de Lola y, sorprendentemente, de Sofía Suescun quien hasta ahora no había llorado en Supervivientes All Stars, reflejaban la desesperación absoluta ante la colosal tormenta. Para ellos, no era solo ser evacuados de urgencia a la palapa; era el retorno a una playa devastada, otra noche sin ropa seca, sin dormir, sin poder pescar, sin fuego, perdiendo lo poco que les quedaba.
«¿Qué vamos a hacer toda la noche? Está todo mojado«, decía Suescun entre lágrimas en Supervivientes All Stars. «Ya es un cúmulo de todo, estamos pasando mucha hambre, las condiciones no acompañan y la convivencia menos todavía, pues uno explota. ¿Algo peor puede pasar? Es que no lo sé«, sentenciaba. Porque Sofía no da puntada sin hilo y a lo que se refería con «la convivencia, menos» es a que la relación entre ella y Marta Peñate ha llegado a tal punto que o cortan ellas o corta el programa, pero así lo único que puede ocurrir es que todo acabe como el rosario de la aurora.