Concha Velasco, una de las actrices más queridas y respetadas de España, dejó un vacío imborrable en el corazón del país tras su partida el pasado 2 de diciembre. Su legado artístico, construido a lo largo de décadas de impecable trayectoria, sigue vivo en la memoria de quienes la admiraron sobre los escenarios y frente a las cámaras.
Pero más allá de la fama y el reconocimiento público, Concha Velasco fue un pilar fundamental para su familia, cuyo dolor por su ausencia sigue latente. Su sobrina, la también actriz Manuela Velasco, ha compartido con entereza cómo la familia enfrenta esta difícil etapa, marcada por la tristeza pero también por la celebración de la vida.
Un dolor que el tiempo ayuda a sobrellevar
En una reciente entrevista, Manuela Velasco se sinceró sobre el impacto que la pérdida de su tía ha tenido en la familia, especialmente en sus primos. Con palabras cargadas de emoción, reconoció que la pérdida de una madre es una herida que nunca termina de cerrarse: «Yo creo que eso no se recupera nunca, la pérdida de una madre, el dolor se va colocando y tienes que continuar y ya está recuperarte no lo creo».
Esta frase, llena de verdad y sentimiento, refleja la realidad de muchas familias que han tenido que afrontar la pérdida de un ser querido. El dolor, aunque no desaparezca por completo, va encontrando su lugar con el paso del tiempo, permitiendo que la vida continúe.
Es precisamente esa voluntad de seguir adelante, honrando la memoria de Concha Velasco, lo que ha guiado a la familia en los últimos meses.
Celebrando la vida y el amor: la boda familiar
Un ejemplo de ello fue la reciente boda de la hermana de Manuela Velasco, un evento cargado de emotividad en el que la familia se reunió para celebrar el amor y la vida. Manuela, con la calidez que la caracteriza, compartió algunos detalles de la ceremonia, revelando que fue un evento íntimo y muy especial: «muy bien, muy emocionante, la verdad, muy bonito, además muy íntimo en casa de mis padres que era done quería mi hermana».
La actriz, que tuvo un rol muy especial en la ceremonia, confesó haber sentido nervios comparables a los de un estreno: «quería que fuera especial y bonito para los dos, fue hermosísimo ponerme en contacto con los amigos de Óscar y Carlota, que participaran y hablaran pero vamos, la noche de antes, parecía yo al novia e los nervios que pasé».
La boda, que contó con la presencia de los primos de Manuela, estuvo llena de emotivos detalles y sorpresas para los novios: «les sorprendió la gente que habló, de la manera, la banda sonora, se casaron en riaza y el alcalde estuvo a nuestra disposición, nos dijo hacer lo que queráis, nos dejó todo el tiempo y el espacio para organizar lo que queríamos».
