Elena Tablada es una figura emblemática que nunca deja de sorprender a sus seguidores. A sus 43 años y con 1,62 metros de estatura, ha decidido presentarse a Miss Universo para representar a Cuba, el país de origen de sus padres. A pesar de ser consciente de que está fuera de los cánones tradicionales de estos concursos de belleza, Elena abraza esta oportunidad con entusiasmo y determinación.
Un desafío fuera de los estándares
Elena Tablada bromea con su «más menos 20»: 20 años de más y 20 centímetros de menos respecto a sus rivales. Sin embargo, esto no ha impedido que avance en la competida preselección, en la cual ya ha sido una de las 100 candidatas preseleccionadas entre más de 1000 participantes. La fase final se celebrará en septiembre, donde se determinará si será la representante de Cuba en el certamen de Miss Universo que tendrá lugar en noviembre en México.
Una misión llena de ilusión
Este nuevo reto lo afronta Elena con gran ilusión y optimismo. En una reciente entrevista en el programa ‘Y ahora Sonsoles’, afirmó con convicción: «No hay límites para conseguir lo que uno quiera y para estar linda, para estar bella, para estar feliz y para estar completa«. Estas palabras reflejan su actitud positiva y su compromiso con lo que realmente le apasiona.
La presencia en eventos icónicos
Este domingo, Elena reapareció en el concierto de Luis Miguel en Madrid, mostrando su entusiasmo por la posibilidad de ser ‘Miss Cuba’ en Miss Universo. Relató que nunca se le habría pasado por la cabeza participar en un concurso de esta magnitud, pero que ahora afronta esta oportunidad con naturalidad a pesar del revuelo que ha causado en España. «Son cosas que se me ponen en el camino de mi vida. Al final mi familia me embulló, como os digo, las cosas pasan porque pasan y a ver qué pasa ahora, estamos siguiendo plazos y esperando a ver con qué nos sorprenden.
La superación de obstáculos personales
Por otro lado, su relación con Javier Ungría sigue siendo completamente nula. A su regreso de ‘Supervivientes’, él está inmerso en una batalla judicial por la custodia de su hija Camila, de 4 años. Elena menciona que «No estamos en ningún punto, Javier es parte del pasado y ahora mismo no hay nada». «Esperando la resolución del juicio. Ya queda poco, si Dios quiere ya» ha añadido, insinuando que pronto se conocerá el resultado.
Una candidata auténtica y sin miedo
La autenticidad de Elena
La autenticidad de Elena Tablada brilla en su capacidad para aceptar los desafíos sin temor. A pesar de los estándares rígidos y los estereotipos habituales en los concursos de belleza, su decisión de participar en Miss Universo representa una luz de esperanzas para muchas mujeres que alguna vez se sintieron limitadas por su edad o estatura. Su compromiso para representar a Cuba viene del profundo orgullo por sus raíces y la voluntad de romper barreras.
Su impacto en las redes sociales
Elena ha adoptado el término ‘Cubañola’ como uno de sus hashtags preferidos en redes sociales, donde fusiona su identidad cubana y española. Este término ha resonado fuertemente entre sus seguidores, subrayando su identidad única y su capacidad de conectar con su audiencia. Su autodenominación no solo es un juego de palabras, sino una declaración poderosa de su dualidad cultural.
La inspiración para nuevas generaciones
Un ejemplo de perseverancia
El viaje de Elena Tablada hacia Miss Universo no se trata solo de belleza exterior, sino de una combinación de determinación, resistencia y autenticidad. Su historia inspira a nuevas generaciones a no rendirse a la primera señal de dificultad y a perseguir sus sueños sin importar los obstáculos que puedan encontrar en el camino.
La belleza sin límites de edad
La participación de Elena también redefine lo que significa la belleza y la elegancia. A sus 43 años, envía un fuerte mensaje a la sociedad sobre la actitud y la autoaceptación: «No hay una edad específica para ser bella«. Esta perspectiva desafía las normas tradicionales y ofrece una visión fresca y alentadora.
