Este jueves, Enagás repartirá por primera vez el dividendo ‘de guerra’ establecido por la compañía para poder hacer frente a las faraónicas inversiones en hidrógeno renovable a las que se ha comprometido para los próximos años. Los accionistas recibirán una retribución de 1,044 euros por título, a mucha distancia de los 1,74 euros de 2023. La corrección en bolsa se ha dejado sentir y la cotización de la gasística caía a algo menos de 13 euros a media mañana del martes, desde los más de 14 del lunes.
El pasado marzo, la junta general de accionistas de Enagás aprobó un dividendo total por acción de un euro por título para el período 2024-2026. Esta remuneración «sostenible» cuenta, según la empresa, con un pay-out acorde a los flujos de caja de la compañía y en línea con el de sus pares en el mercado.
De este modo, el cónclave inversor de la empresa daba su bendición a los planes del CEO, Arturo Gonzalo, para hacer de España el ‘templo’ del hidrógeno ‘verde’ en Europa. La ‘hoja de ruta’ trazada por la directiva para hacer frente a las carísimas infraestructuras en torno al gas renovable supone, inevitablemente, rebajar la retribución al accionista.
ENAGÁS PAGA LA INVERSIÓN EN HIDRÓGENO
Y es que la inversión total bruta estimada en España para los proyectos de hidrógeno ascenderá a nada menos que 5.900 ‘kilos’. De esta cantidad, se destinarán 4.900 millones de euros a la infraestructura española de esta fuente energética y otros 1.000 ‘kilos’ a la parte española de H2Med, el gran corredor del hidrógeno en Europa occidental y central, del que nuestro país formará parte.
Según explicó Gonzalo, considerando la financiación europea la inversión neta estimada de Enagás en infraestructuras de hidrógeno será de 3.200 millones de euros, a desarrollar principalmente entre 2027 y 2030, en una etapa de crecimiento en la que la compañía «va a pasar a ser una empresa de futuro en crecimiento con un rol clave en la nueva economía descarbonizada».
ESTE MARTES, LA ACCIÓN DE ENAGÁS CAÍA EN BOLSA CASI MEDIO PUNTO PORCENTUAL DEBIDO AL EFECTO ‘EX CUPÓN’, ES DECIR, LA FECHA A PARTIR DE LA CUAL EL ACCIONISTA RETIENE EL DERECHO AL DIVIDENDO AUNQUE HAYA VENDIDO LOS TÍTULOS
El compromiso de la compañía con esta revolución ‘verde’, junto con otros factores coyunturales, se ha cobrado su precio en Bolsa: la acción de Enagás acumula pérdidas cercanas al 16% en lo que llevamos de 2024.
Este martes el desplome diario rondaba el punto y medio porcentual. La compañía lo achacó al efecto ex cupón. La fecha ex cupón se refiere al momento a partir del cual el accionista retiene el derecho al dividendo, aunque haya vendido sus títulos.
LA RED H2MED VA COBRANDO FORMA
Enagás ha sacrificado el dividendo en el altar del hidrógeno y ya está empezando a recoger los frutos: el pasado 25 de junio, firmó con sus homólogos de Francia y Alemania el acuerdo preliminar para el desarrollo de BarMar, una de las secciones principales de H2Med.
El convenio, que asumió la forma de acuerdo de desarrollo conjunto (JDA, por sus siglas en inglés), vincula a Enagás y los dos gestores de la red de transporte de Francia (GRTgaz y Teréga), junto con el gestor de la red de transporte de Alemania como operador asociado (OGE). El clausulado define las condiciones de colaboración para materializar el proyecto BarMar, que conectará Barcelona y Marsella mediante un hidroducto submarino.
Enagás tendrá el 50% del accionariado, GRTGaz el 33,3% y Teréga el 16,7%, de modo que las partes española y francesa del proyecto BarMar contribuyen con idéntico porcentaje: 50% cada una.
En cuanto a la interconexión de hidrógeno renovable entre Portugal y España, que unirá Celorico da Beira y Zamora (CelZa), Enagás y el operador de red luso (REN) han firmado también un acuerdo adicional al Memorando de Entendimiento en vigor, con la finalidad de desarrollar y financiar conjuntamente los estudios correspondientes para el desarrollo del proyecto.
EL CORREDOR H2MED SERÁ UN GIGANTESCO CONDUCTO QUE ENLAZARÁ PUNTOS CLAVE DEL SUMINISTRO DE HIDRÓGENO EN PORTUGAL, ESPAÑA, FRANCIA Y ALEMANIA
A finales de noviembre, la Comisión Europea (CE) adoptó el Acto Delegado de Proyectos de Interés Común (PCI) que incluye al H2Med. Inicialmente concebido como un canal gasístico, terminó evolucionando en un ‘hidroducto’ que enlazará puntos clave del suministro español y portugués con Francia y Alemania.
El corredor H2Med está formado por una conexión entre Celorico da Beira en Portugal y Zamora en España (CelZa) y una conexión marítima entre Barcelona y Marsella (BarMar). CelZa contará con una capacidad de hasta 0,75 millones de toneladas de hidrógeno renovable, una longitud 248 kilómetros y dispondrá de una estación de compresión en Zamora de 24,6 megavatios (MW), y BarMar dispondrá de una capacidad de hasta dos millones de toneladas, una longitud de 455 kilómetros y de una estación de compresión en Barcelona de 140 MW.