Descubre el paraíso en Mallorca: Caló Des Moro. Con aguas cristalinas que rivalizan con una piscina, esta pequeña cala al sur de la isla es un tesoro imperdible. Aprende cómo llegar, qué ver en Caló Des Moro y dónde disfrutar de delicias locales. Explora playas cercanas y prepárate para una experiencia única en este rincón paradisíaco de Mallorca.
1¿Qué es Caló Des Moro?
Caló Des Moró reina como la playa paradisíaca por excelencia en España y con razón. Sus aguas turquesa cristalinas, enclavadas entre acantilados, la convierten en un tesoro natural incomparable. Acceder a esta pequeña cala requiere una corta caminata de 15 minutos desde el área de estacionamiento, pero el esfuerzo se ve recompensado con creces al contemplar su belleza serena. Considerada por muchos como la joya de Mallorca, es el lugar perfecto para nadar, bucear o simplemente relajarse bajo el sol mediterráneo. Aquí se captura la esencia misma del paraíso, atrayendo a visitantes que buscan experiencias inolvidables en un entorno sublime.
Caló Des Moro se encuentra en el extremo sur de Mallorca, lo que significa que la distancia para llegar puede variar considerablemente según tu ubicación. Desde Palma de Mallorca, el trayecto en coche lleva aproximadamente 56 minutos, mientras que desde el norte de la isla supera una hora. Nosotros optamos por acceder desde Colonia Sant Jordi, ubicación desde la cual apenas nos llevó 20 minutos en coche. Planificar la ruta adecuada te permitirá disfrutar plenamente de esta espectacular cala, asegurando que cada minuto del viaje valga la pena en este rincón paradisíaco de Mallorca.
Una vez en el municipio de Santanyí, simplemente introduce en Google Maps el parking de Caló Des Moro. Allí es donde debes dejar el coche, indicado exactamente en el mapa. El parking está bien señalizado con carteles en la carretera que conduce a Cala Llombards, y es gratuito. Durante mi visita en la tercera semana de junio, no tuve dificultades para encontrar espacio. Sin embargo, es recomendable considerar la alta temporada, como agosto, donde la disponibilidad podría variar. Es aconsejable llegar temprano para asegurarte un lugar y disfrutar sin preocupaciones de esta impresionante cala en Mallorca.
La cosa de tuerce un poco cuando ya llegas al acceso propiamente de la playa. Aquí tienes que bajar unas pequeñas escaleras de rocas con bastante pendiente. No son peligrosas, ni mucho menos, pero sí que requieren algo de concentración, incluso bajar con el culo o tener que usar las manos. Yo tengo un problema en la espalda y siempre tengo cierta precaución ante pendientes pronunciadas. Pero son literalmente siete escalones. Muy pero que muy sencillo. He visto bajar a niños perfectamente, pero te lo comento porque nunca está de más andar con ojo.
