La incertidumbre continúa en la fábrica de Ford Almussafes, donde las negociaciones para el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) se encuentran en una fase crucial. La cuarta reunión de la comisión negociadora, inicialmente prevista para el martes, fue finalmente pospuesta para el miércoles, un indicativo del complejo escenario que se está viviendo.
Las conversaciones se centran en buscar alternativas al despido con opción de recontratación que la empresa planteó inicialmente para 996 trabajadores. Las propuestas sobre la mesa incluyen un ERTE, el mecanismo RED o alguna fórmula similar que garantice una transición más suave para los empleados afectados.
Buscando un acuerdo: Del ERE a la flexibilidad laboral
La propuesta original de Ford contemplaba un ERE que afectaba a 1.622 trabajadores, con 626 bajas incentivadas definitivas y 996 despidos objetivos con preferencia de recontratación en 2027. Sin embargo, la presión de los sindicatos y la necesidad de un acuerdo que garantice el futuro de la planta han llevado a explorar nuevos caminos.
Los sindicatos, especialmente UGT, buscan alternativas que protejan el empleo y que permitan a los trabajadores afectados afrontar un periodo de transición con garantías. El mecanismo RED, un sistema de gestión de recursos humanos que permite una mayor flexibilidad laboral, se ha presentado como una posible solución.
El hecho de que la empresa se muestre abierta a estudiar la viabilidad de estas alternativas refleja la voluntad de llegar a un acuerdo que minimice el impacto del ajuste en la plantilla. La posición de los sindicatos, que consideran que las negociaciones avanzan en la línea correcta, da un atisbo de optimismo para alcanzar un acuerdo satisfactorio para ambas partes.
El futuro de Ford Almussafes: Un nuevo modelo de producción
La incertidumbre en torno al ERE se enmarca en un contexto más amplio de transformación del sector automovilístico. La apuesta de Ford por la electrificación de su gama de vehículos ha generado un cambio en el modelo de producción de la planta valenciana, con la necesidad de adaptar la plantilla a las nuevas necesidades.
La empresa ha destacado en varias ocasiones su compromiso con la transición y con el futuro de la planta. La propuesta de recontratación en 2027 para los trabajadores afectados por el ERE refleja la intención de Ford de mantener una parte importante de la plantilla para la producción del nuevo vehículo multienergía que se fabricará en Almussafes.
El futuro de Ford Almussafes depende en gran medida de la capacidad de la empresa y los sindicatos de llegar a un acuerdo que garantice la viabilidad de la planta y el bienestar de los trabajadores. La negociación del ERE es un paso crucial en este proceso, y la búsqueda de soluciones flexibles y justas es fundamental para asegurar un futuro exitoso para la fábrica y para la plantilla.