Dentro del terreno de la animación, el estudio Hanna-Barbera, es toda una leyenda, logrando conquistar los corazones de diferentes generaciones de españoles, con sus historias animadas, las cuales fueron todo un ejemplo de que se pueden lograr grandes proyectos, por fuera de Disney.
A lo largo de su historia, existió un detalle dentro de las animaciones de Hanna-Barbera, el cual logró convertirse en toda una marca registrada del estudio y que, muchos años después, se logró descubrir el misterio detrás de su mitología.
El truco de Hanna-Barbera que logró convertirse en toda una marca registrada
En el año 1957, los dibujantes y directores William Hanna y Joseph Barbera, fundaron el estudio de animación Hanna-Barbera, el cual buscaba convertirse en un gigante de la industria, llevando a la pantalla de todos los hogares del Mundo, historias que no lograron pasar el visto bueno de Disney. A lo largo de su historia, los fans de las series animadas del estudio notaron que todos los personajes, poseen algo que separa su cabeza del cuello y descubrieron que esto, era un truco que realizaba el estudio para abaratar costos de animación.
El secreto se encuentra en la gran mayoría de sus personajes principales o los que lograban estar en pantalla durante un largo periodo de tiempo, en su mayoría dentro de Los Picapiedras, donde los personajes masculinos solían llevar bufandas, corbatas o incluso cuellos de camisa, y los femeninos, solían tener grandes joyas o collares en su cuello. Este truco, se utilizaba para que los animadores, ahorraran tiempo de producción a la hora de animar personajes que hablan, utilizando así dinero que sobraba en otros detalles de la animación, ya que no era necesario animar el cuerpo completo, sino que solo alcanzaba con cambiar las cabezas.
El truco que fue reutilizado por la compañía más importante de la industria de la animación
Al igual que Hanna-Barbera, la multimillonaria empresa Disney, ha utilizado un truco de animación (utilizando el recurso de una prenda de vestir) que logró convertirse en todo un símbolo de sus personajes; a diferencia de su competidora, Disney tomó la decisión de que la gran mayoría de sus personajes clásicos, como Mickey Mouse, tuvieran guantes para lograr distinguir entre las manos y los pies, partes del cuerpo que por aquel entonces, no se lograban distinguir por los métodos de dibujo que se utilizaban.
Según el mismo Walt Disney, durante las hojas de su autobiografía, este truco de animación, además de lograr distinguir entre las partes del cuerpo, lograban que sus personajes fueran más humanos: “No queríamos que Mickey Mouse tuviera patitas de ratón, tenía que parecer más a un humano. Por eso le pusimos guantes”. A diferencia del truco de Hanna-Barbera, el de la compañía del ratón logró revolucionar a la industria y se convirtió en todo un fenómeno mundial, llegando al punto de que sus competidoras, lo utilicen para sus personajes más famosos, como el caso de Warner Bros, que imitó el uso de los guantes en el célebre Bugs Bunny.