Pablo Martín Páz Gavira, más conocido como Gavi, es uno de los grandes valores que tiene el Fútbol Club Barcelona dentro de su plantilla. El juvenil es una de las tantas joyas surgidas de La Masía que han encontrado su lugar con Xavi Hernández en el primer equipo, debutando a corta edad, y sumando vasta experiencia en pocos años.
El canterano tuvo su aparición en el Barça el 29 de agosto de 2021, con apenas 17 años, en un encuentro correspondiente a LaLiga y desde ese entonces no salió más de la plantilla, ganando protagonismo en el equipo hasta volverse en una pieza vital. A tal punto se ha vuelto importante que en Les Corts lo han extrañado horrores durante este curso por la grave lesión que pacedió jugando para España a finales de 2023.
¿Cuánto dinero gana Gavi en Barcelona?
Sabido es que la situación financiera en el Fútbol Club Barcelona dista mucho de ser la ideal y eso le ha traído varios dolores de cabeza a Joan Laporta, que ha tenido que hacer malabares para poder conseguir recursos económicos e incorporar jugadores para darle aire fresco a la plantilla. Esto sumando también la gestión que debe realizar con las fichas de los futbolistas que ya se encuentran en el vestuario blaugrana.
Gavi, como una de las grandes joyas del Barcelona, gana un buen dineral, aunque esto no alcanza para meterlo entre los salarios más elevados del vestuario culé. Es que, por mes Gavi está ganando unos 566 mil euros, lo que le significan unas ganancias anuales de casi 7 ‘kilos’ (unos 6.8 millones de euros) al mediocentro español.
La sorprendente adicción de Gavi que casi echa a perder su carrera

Si bien hace varios meses que está presente con el Barcelona, Gavi es uno de los emblemas que tiene la institución culé en su plantilla. Pero, esto podría no haber llegado a suceder nunca de no ser por la ayuda que recibió por parte de su entorno para superar una impactante adicción casi trunca su carrera como futbolista profesional.
Es que, de pequeño, Gavi tenía una gran adicción a los dulces. Tal era el gusto que tenía por los caramelos que sus entrenadores de Real Betis, donde hizo una parte de su trayecto dentro del fútbol base, se mostraban preocupados por su alimentación y los efectos que pudiera tener también en su dentadura. Por eso, para resolver esta situación, su agente tuvo que pagar un costoso tratamiento de odontología y, además, cuando llegó a las divisiones juveniles del Barcelona tuvo que cambiar sus hábitos alimenticios para poder tener un estado físico óptimo.