BBVA-Banco Sabadell, una fusión con más pros que contras en caso de éxito

Aunque en algunos aspectos, el mercado tiene división de opiniones para los afectados, hay una tendencia a ver la posible fusión como una operación con más puntos positivos que negativos. Así se refleja en un análisis al que ha accedido MERCA2 en el que, entre otras cosas, señala que Banco Sabadell «pasará a formar parte de un grupo bancario mucho más grande y diversificado, y sus calificaciones se beneficiarán del apoyo de la matriz de BBVA, incluso en ausencia de una integración legal completa», es decir, en caso de que tengan que deshacerse de parte del negocio que compren Sabadell o que BBVA y la entidad vallesana sean entidades diferentes y separadas aún formando parte del mismo grupo.

BBVA, BANCO SABADELL Y EL MINISTERIO DE ECONOMÍA

Si BBVA adquiere Banco Sabadell, la integración legal de ambas entidades en una sola está sujeta a la aprobación del Ministerio de Economía español. “A día de hoy, la oferta se encuentra todavía en una fase muy temprana para predecir un resultado definitivo, pero si tiene éxito, consideramos que la operación tendrá un efecto positivo neto para las dos entidades bancarias implicadas desde una perspectiva crediticia”, destaca Morningstar.

La operación tendrá un efecto positivo neto para las dos entidades bancarias implicadas desde una perspectiva crediticia, según Morningstar

“Desde el punto de vista de la calificación crediticia, la adquisición de Sabadell por parte de BBVA tendría las calificaciones crediticias a largo plazo de Sabadell, que actualmente se sitúan dos escalones por debajo de las de BBVA. Las calificaciones crediticias a largo plazo de BBVA reflejan su fuerte franquicia con un alto diversificación internacional y su capacidad para generar beneficios sólidos y recurrentes”.

Este punto de vista más específico, sobre rating, llega al mismo tiempo que Ethifinance apunta que “la fusión impulsaría la consolidación del sector financiero español, reduciendo el número de entidades relevantes y creando un actor financiero más robusto y competitivo».

«Con la fusión, los tres bancos más grandes de España sumarían el 80% de los activos del sector bancario español”. Si bien, diversas voces del Gobierno alertan sobre una mayor dificultad en el acceso a la financiación para las PYMES de concretarse la fusión, la Asociación Española de Banca (AEB) defiende la amplia y variada oferta bancaria en España, con una concentración por debajo de la media europea. Además de la posición de BBVA, que estima que su cuota de mercado tanto en el mercado minorista como en el sector de las pymes se consideraría moderada”. La fusión destaca por el encaje estratégico y la complementariedad de ambas entidades”, destaca.

El grupo

Según la agencia de calificación Morningstar, “si la adquisición sigue adelante, consideramos que Sabadell pasará a formar parte de un grupo bancario mucho más grande y diversificado, y que sus calificaciones se beneficiarán del apoyo de la matriz de BBVA, incluso en ausencia de una integración legal completa . Las calificaciones crediticias de Sabadell se beneficiarían de un acceso más diversificado y barato acceso a los mercados de capitales, tanto para necesidades de financiación como de capital».

BBVA
BBVA

Apuntan que, “sin embargo, observamos que hasta que el proceso se resuelva, Sabadell tiene una capacidad reducida para tomar decisiones estratégicas fuera de su actual estratégicas fuera de su perímetro de negocio actual. Además, el banco ha suspendido temporalmente el programa de recompra que tenía en marcha».

Respecto a las calificaciones crediticias de BBVA, “observamos que la operación mejoraría la franquicia de BBVA en España, con cuotas de mercado potenciales combinadas de préstamos domésticos, calculadas por Morningstar DBRS, superiores al 24% para empresas y al 21% para hogares, frente a aproximadamente el 16% y el 15%, respectivamente, a finales de 2023.

«También introduciría una diversificación adicional de los prestatarios, ya que BBVA se beneficiaría de la franquicia líder de Sabadell entre las pymes españolas, que es el mayor segmento  segmento empresarial en España”. “Además, abriría la puerta a BBVA para operar en el Reino Unido, un nuevo e importante mercado para BBVA”, indican. La operación también reduciría la exposición relativa de BBVA a los mercados emergentes, donde los riesgos país suelen conllevar una mayor volatilidad de los beneficios.

Respecto a las calificaciones crediticias de BBVA, “observamos que la operación mejoraría la franquicia de BBVA en España

«La entidad combinada podría beneficiarse de menores costes de personal, TI, cumplimiento y financiación. Según nuestros cálculos, las operaciones de BBVA en España representarían alrededor del 38% del beneficio antes de impuestos (BDI) tras la fusión, frente al 28% del BDI de BBVA en el ejercicio 2013. “Aunque, en nuestra opinión, esto sigue reflejando un nivel significativo de diversificación geográfica, el alcance del beneficio de la diversificación internacional se reduciría”, agregan.

LOS RIESGOS

“También vemos riesgos potenciales de ejecución, ya que la fusión de estas dos entidades, dada su escala y diversificación internacional, será mucho compleja que cualquiera de las transacciones precedentes ejecutadas por cualquiera de ellas”.

La operación tiene potenciales riesgos de ejecución

Según la agencia, “en el improbable escenario en el que BBVA adquiera Sabadell pero la fusión entre ambas entidades no sea autorizada por el Gobierno español, BBVA no podrá materializar gran parte de los costes esperados sinergias, lo que podría lastrar temporalmente su rentabilidad”. “No obstante, desde una perspectiva crediticia consideramos que, en conjunto, la transacción tiene más pros que contras si tiene éxito”.

Sobre la opa hostil, Ethifinance considera que “representa un esfuerzo de BBVA por avanzar con la operación de fusión y consolidar su posición en el mercado, a pesar del rechazo inicial de Sabadell. Sin embargo, esta estrategia conlleva riesgos significativos, incluyendo posibles repercusiones legales, reacciones adversas del mercado y un potencial daño a la reputación de BBVA si la oferta no tiene éxito». «Esta medida añade una capa adicional de incertidumbre al panorama financiero, planteando preguntas sobre el futuro de Sabadell y la reacción de otras partes interesadas, como el Gobierno, reguladores, accionistas, empleados”, apuntan desde Ethifinance.