Madrid se juega casi 40.000 ‘kilos’ con los objetivos de potencia de los centros de datos

En el caso de que Madrid cumpla el objetivo de 616 megavatios (MW) de potencia instalada en centros de datos previsto para 2026, se desbloquearía el premio gordo: nada menos que 38.000 millones de euros en inversiones ligadas a esta tecnología regarían el emprendimiento, el empleo y la actividad económica de la región. La mala noticia es que no llevamos camino de ello por culpa del deficiente ritmo de construcción de redes eléctricas.

Un centro de datos es un emplazamiento físico donde se almacenan computadoras, junto con la maquinaria necesaria para su correcto funcionamiento y mantenimiento. Contiene la infraestructura de computación que requieren los sistemas de Tecnología de la Información (TI): servidores, sistemas de almacenaje y equipos de red.

En estas instalaciones es donde las empresas y organizaciones de todos los sectores guardan su información. Y, como es lógico, a medida que la empresa u organización crece y se expande, también lo hacen sus operaciones informáticas, aumentando sus necesidades de almacenaje y, por ende, de energía.

LOS CENTROS DE DATOS EN MADRID

En las conclusiones de su ‘Informe del Sector del Data Center en Madrid 2024-2030′, Spain DC, la asociación española del ramo, plantea un escenario ‘favorable’ en el que se logra la ejecución en plazo de los MW previstos, lo que traería una inversión directa de 14.000 millones de euros y 24.000 ‘kilos’ adicionales de inversión indirecta.

Los autores del informe puntualizan que este escenario «se circunscribe a un contexto de cumplimiento escrupuloso y a tiempo de sus obligaciones por parte de las administraciones públicas, sin que ninguno de los objetivos implique incremento de gasto público que pudiera significar restricción a la inversión.

En los tres escenarios restantes contemplados en el informe -categorizados como ‘tendencial’, ‘hiperregulación’ y ‘hostil’, en función del ritmo de instalación- Madrid alcanzaría los 616 MW de potencia instalada previstos para 2026 en distintos momentos del periodo 2026-2030. La inversión directa acumulada en infraestructura digital se situaría en torno a 6.000 millones de euros, una cifra a la que se le añadiría una inversión indirecta de, como mínimo, 10.034 millones de euros.

«PARA SITUAR A MADRID ENTRE LAS POTENCIAS EUROPEAS EN LA INDUSTRIA DE LOS CENTROS DE DATOS, será necesaria la intensificación de la inversión en redes de transporte de electricidad y su efectiva ejecución»

Manuel Jiménez, director ejecutivo de Spain DC

La diferencia es, por tanto, más que notoria, por lo que es vital acelerar la inversión en infraestructuras digitales y eléctricas para que la potencia energética disponible esté a la par con la demanda de centros de datos. El director ejecutivo de Spain DC, Manuel Jiménez, destaca que para lograr el crecimiento que sitúe a Madrid entre las regiones FLAP «será necesaria la intensificación de la inversión en redes de transporte de electricidad, y su efectiva ejecución, así como la agilización de todos los trámites administrativos ante ayuntamientos y Comunidad Autónoma».

El término FLAP -acrónimo de Frankfurt, Londres, Ámsterdam y París– alude a las ubicaciones que concentran la mayor parte de los operadores que dominan el mercado de colocación de centros de datos en Europa Occidental. En 2022, estas regiones acaparaban el 55% de los ingresos de colocación minorista y mayorista de data centers, según Synergy Research Group.

ELECTRIFICACIÓN INSUFICIENTE, LENTA Y DESORDENADA

El análisis de Spain DC apunta que en estos momentos en Madrid hay 147 megavatios (MW) de potencia instalada en centros de datos. Esta cifra representa un crecimiento interanual del 25,6%, si bien supone 30 MW menos que las previsiones iniciales, debido a la ralentización en la ejecución como consecuencia de las «dificultades de tramitación y suministro» eléctrico.

«El problema competitivo para el sector no se encuentra en la disponibilidad de la energía, sino en la dificultad y lentitud del acceso. La rápida expansión de las energías renovables no está teniendo la necesaria correspondencia con el desarrollo de infraestructuras de red, que presenta un grave déficit», matiza Jiménez.

Centros de datos: Aragón se suma a Madrid, Barcelona y Lisboa como ubicación de referencia

No es la primera vez que la asociación pone el grito en el cielo por este motivo. El Plan de Transporte de Energía Eléctrica 2021-2026, aprobado el pasado marzo por el Consejo de Ministros, dejó fuera a los centros de datos, a lo que Spain DC reaccionó de inmediato exigiendo al Ejecutivo que corrija esta decisión, por muchas y variadas razones. La más notable de ellas es que se trata de una industria esencial no solo para el futuro y la transición ecológica, sino para el mismo presente económico y laboral de nuestro país.

Goldman Sachs considera que la creciente demanda eléctrica de la Inteligencia Artificial (IA) y los centros de datos obligará a Europa a invertir una cantidad superior a las ocho cifras para renovar su vetusta red

Otras voces, procedentes de los más diversos sectores se han unido a esta reivindicación. A las muchas reservas expresadas por los gigantes corporativos y la patronal eléctrica se suman otras fuentes internas del sector de la electricidad, que alertan de una potencial pérdida de 60.000 millones de euros causada por las carencias del Plan.

Eurelectric estima que la UE necesita invertir hasta 2050 y de forma anual en torno a 67.000 millones de euros. Goldman Sachs, por su parte, considera que la creciente demanda eléctrica de la Inteligencia Artificial (IA) y los centros de datos obligará a Europa a invertir una cantidad superior a las ocho cifras para renovar su vetusta red.

En concreto, los analistas del banco de inversión esperan casi 800.000 millones de euros en gastos de transmisión y distribución en la próxima década, así como unos 850.000 ‘kilos’ en inversiones en energía solar, eólica terrestre y eólica marina.