El origen de este plato se remonta a los tiempos de la Cuba colonial, cuando los españoles introdujeron el arroz en la isla tras colonizarla. A medida que se asentaron en la región, combinaron el arroz con otros ingredientes locales, como el huevo frito, la salsa de tomate y el plátano. La costumbre de añadir plátano frito a la mezcla fue una innovación culinaria que se integró con los sabores tradicionales de la isla. Aunque este plato es una fusión de influencias españolas y locales, los cubanos no lo consideran como parte de su gastronomía nativa, a pesar de su arraigo en la cultura culinaria de la región.
4CÓMO SE COCINAN LOS PLÁTANOS
Mientras el arroz se cocina, pela los plátanos y córtalos a lo largo en dos mitades. En una sartén aparte, calienta una cucharada de aceite y fríe las mitades de plátano hasta que estén doradas por ambos lados. Retira y reserva. En la misma sartén, agrega un poco más de aceite si es necesario y fríe los huevos uno por uno según tu gusto (enteros, revueltos, etc.). Escúrrelos en papel absorbente y mantenlos calientes.