Es común que tras varios usos, un peine acumule residuos de cabello, suciedad, grasa y productos capilares, lo que afecta su limpieza e higiene. Estos restos pueden provocar la proliferación de bacterias y malos olores, comprometiendo la salud del cuero cabelludo y la apariencia del cabello. Para evitarlo, se recomienda limpiar el peine regularmente. Porque mantener la higiene del peine no solo asegura un cabello limpio y saludable, sino también prolonga la vida útil del mismo, evitando la acumulación excesiva de suciedad. Y como sabemos que dejarlo como nuevo es algo desesperante y a veces imposible, a lo largo de este artículo te vamos a explicar cómo tienes que hacerlo.
8Aplica la mezcla en el peine durante 20 minutos
Para revitalizar tu peine, sumérgelo en una mezcla de agua caliente con vinagre de manzana y bicarbonato de sodio durante unos 20 minutos. Esta solución descompone la acumulación de residuos y bacterias, dejando el peine fresco y limpio. Después del remojo, utiliza un cepillo de dientes viejo o un palillo para eliminar cualquier suciedad persistente. Enjuaga el peine con agua limpia y déjalo secar al aire. Este proceso renovador garantiza que tu peine esté higiénico y listo para cuidar tu cabello de manera óptima.