Esquerra Republicana (ERC) ha presentado una proposición no de ley en el Congreso con la que plantean que el Banco de España dé la ficha bancaria al Instituto Catalán de Finanzas, un organismo dependiente de la Generalitat, con el fin de que este pueda operar en Cataluña como banco público.
El instituto es un organismo dependiente del gobierno catalán y ya tiene finalidades similares a las de un banco comercial, según explica la propia entidad, como otorgar y formalizar créditos, operaciones de financiación, avales y otras operaciones.
La petición de ERC se enmarca en una iniciativa para alertar de los riesgos de la concentración bancaria, a tenor de la Oferta Pública de Adquisición (OPA) que BBVA lanzó al Sabadell. De hecho, en su primer punto, la propuesta insta al Gobierno a alertar a las instituciones europeas de los efectos nocivos sobre la competencia que implicaría, dicha operación.
Además de advertir de que las fusiones bancarias implican el cierre de oficinas y despidos colectivos, la formación denuncia que de materializarse la operación entre BBVA y Sabadell, Cataluña se convertiría en el lugar de la Unión Europea con un nivel más elevado de concentración bancaria, de modo que el 80% del negocio estaría en manos de sólo dos entidades.
Por último, dedican un punto para tramitar «urgentemente» dos proposiciones de ley lideradas nacidas en el Parlament, una para garantizar que haya un cajero automático por municipio o por cada 5.000 habitantes y otra para garantizar el retorno social del rescate bancario.
