Es común que muchas localidades españolas compartan límites con países vecinos. Ya sea al norte, limitando con Francia, o al oeste, con Portugal, estos pueblos han vivido en un ambiente internacional que ha dejado una huella profunda en su historia y cultura. Esta convivencia fronteriza les ha brindado peculiaridades interesantes, permitiéndoles fusionar sus costumbres con las de las regiones del otro lado, creando así un tejido cultural único y fascinante. A continuación te dejamos un listado de algunos de los pueblos más bonitos ubicados justo en la frontera.
12QUERALBS, EN GIRONA
Queralbs es un pueblo de gran tradición y legado histórico, con registros que datan desde el año 839. A lo largo de los siglos, ha sido un lugar de pastores, donde los rebaños pastaban y se desplazaban por la zona en busca de pastos frescos. Además de esta tradición pastoril, Queralbs tiene una rica historia minera y de fraguas catalanas, que han dejado una marca importante en la vida y la economía local.
Pero la historia de Queralbs no se detiene ahí. El pueblo es una etapa crucial en la peregrinación al santuario de la Virgen de Nuria, uno de los destinos más queridos y emblemáticos de los Pirineos. Este vínculo con la peregrinación agrega una dimensión espiritual y cultural única a Queralbs, atrayendo a peregrinos y turistas por igual para explorar tanto su legado histórico como la belleza natural de las montañas que lo rodean en la provincia de Girona.