Las alcachofas son una delicia culinaria que deleita los sentidos con su sabor único y su textura tierna. Su aroma terroso y su sabor ligeramente amargo hacen que cada bocado sea una experiencia memorable. Ya sea cocidas al vapor, asadas a la parrilla o salteadas con hierbas y aceite de oliva, las alcachofas ofrecen una explosión de frescura y nutrición. Además, su versatilidad en la cocina permite crear una variedad infinita de platos, desde ensaladas hasta guisos. Con cada bocado, las alcachofas nos invitan a disfrutar de su exquisito sabor y a explorar nuevas formas de deleitar nuestro paladar. Te contamos cómo limpiarlas y pelarlas en un pis pás.
6Esto es lo primero que has de hacer para pelarlas
El proceso inicial para preparar las alcachofas implica colocarlas enteras en una olla con agua, asegurándose de que estén completamente sumergidas. Lleva el agua a ebullición y luego ajusta el fuego a una temperatura media. Permite que las alcachofas hiervan a fuego lento durante unos 40 minutos aproximadamente. Este paso es fundamental para ablandar las alcachofas y facilitar la posterior extracción de las hojas y la preparación para su consumo.