La berenjena es una verdura muy versátil y apreciada en la región del litoral mediterráneo por su capacidad para adaptarse a diversas formas de preparación culinaria. Puede ser rellena y horneada, gratinada e incluso utilizada como sustituto de las tradicionales láminas de pasta en lasañas, lo que la convierte en una alternativa más saludable y sabrosa. Otra opción para disfrutarla es cocinarla al estilo milanesa, una variante deliciosa aunque menos convencional que la preparación típica con filetes de carne.
6REBOZAR Y FREÍR

Pasa cada berenjena aplastada por la mezcla de harina y agua que preparaste anteriormente, asegurándote de cubrir ambos lados de manera uniforme. Luego, empánalas en pan rallado, presionando ligeramente para que el pan rallado se adhiera bien a la superficie de las berenjenas.
Calienta abundante aceite en una sartén a fuego medio-alto hasta que esté bien caliente.
Fríe las berenjenas empanadas en el aceite caliente, volteándolas ocasionalmente para que se doren por ambos lados. No es necesario freírlas por mucho tiempo, ya que ya están cocidas. Solo necesitan el tiempo suficiente para que el empanado tome color y se vuelva crujiente. Una vez doradas y crujientes, retíralas del aceite y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Sirve las berenjenas inmediatamente, acompañadas de un poco de salsa de tomate si lo deseas, o simplemente tal cual, para disfrutar de su delicioso sabor y textura crujiente.